Patrocinado porPatrocinado por

Santo Tirso de Abres quiere poner en marcha un plan de ordenación forestal

La Voz

FORESTAL

ALBERTO LÓPEZ

La asociación de propietarios organizó unas jornadas abiertos a todos los interesados para dar a conocer las ventajas de esta medida

29 nov 2022 . Actualizado a las 10:18 h.

La asociación de propietarios forestales de San Tirso de Abres (Profosta) está convencida de las ventajas de que el monte disponga de un plan de ordenación, por eso el pasado fin de semana organizaron unas jornadas abiertas a socios y no socios con el fin de explicar a los propietarios de montes las ventajas de poner en marcha esta figura. En ella participaron Alejandro Oliveros, ingeniero de montes y actual director de ordenación forestal de Ence, así como Gabino Parrondo, propietario de una empresa de trabajos técnicos y silvícolas.

La iniciativa forma parte de la importante labor divulgativa de Profosta viene desarrollando desde su constitución para dar un impulso a la economía de este concejo asturiano. Es uno de los pocos que cuenta con su superficie agrícola y forestal concentrada, por lo que ahora se quiere dar un paso más y sacar más rendimiento al monte, aseguró Amadeo Molejón, presidente de la entidad. Actualmente, una población envejecida y una producción como la forestal, con un retorno económico a medio y largo plazo, son los dos escollos principales para poner a producir los montes, por eso la asociación quiere mostrar la rentabilidad que pueden tener estos terrenos si se aprovechan convenientemente y también la forma de ponerlos a producir.

Profosta recuerda que ahora las fincas ya tienen una superficie razonable para ser mecanizadas y propone dar un paso más para colaborar en la gestión conjunta y obtener así más beneficios sin perder la titularidad del terreno ni la toma decisiones sobre las fincas. 

Los dos ponentes desgranaron las ventajas que puede suponer desarrollar un plan conjunto de ordenación forestal, que no es más que planificar y ordenar la producción. Partirá este de unas fincas que en su mayor parte están recién taladas y en las que habrá que decidir qué se va a plantar, cómo y para qué, además de qué trabajos silvícolas se van a llevar a cabo. en las parcelas que no están taladas, se haría un inventario de las especies que hay implantadas para definir cuál va a ser su futuro.  

Molejón animó a los presentes a apuntarse para sacar adelante esta plan de ordenación, que hoy es voluntario y cuenta con ayudas al 100 % de la inversión. Recordó, además, que dentro de diez o quince años será prácticamente imposible comercializar madera que no provenga de montes ordenados y certificados. En la jornada se presentaron otras ventajas de esta figura, como pude ser mayor acceso a subvenciones para plantación, poder quedar exentos del IBI, simplificar los trámites de corta y tener superados trámites como la evaluación ambiental o de patrimonio.