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Tim Walz sabe conducir un tractor

M.C. REDACCIÓN

AGRICULTURA

DAVID MUSE | EFE

Los agricultores ganan peso en la carrera hacia la Casa Blanca de la mano del compañero de fórmula de Kamala Harris, que trabajó en la granja familiar en un pequeño pueblo de Nebraska y está muy preocupado por el relevo generacional en el campo y por la alimentación saludable

08 ago 2024 . Actualizado a las 10:06 h.

Hablar del Medio Oeste estadounidense, más allá de grandes ciudades como Chicago, en Illinois, o Detroit, en Michigan, es hablar de unos estados rurales donde el sector lácteo, en Wisconsin; los ranchos de Nebraska, donde la agricultura es la principal industria estatal; las granjas de pollos de Iowa; o los millones de cabezas de ganado vacuno y las plantaciones de cereal de Minessotta son uno de los motores de sus economías. De hecho, la sede mundial de John Deere está en Moline, una ciudad de 43,483 habitantes ubicada en el oeste de Illinois, mientras que la de Cargill es en Minnetonka, una urbe de unos 53.781 habitantes ubicada a escasos kilómetros de Minneapolis, la capital de Minnesota.

No hace falta mucho más que este pequeño viaje por las economías de algunos de los doce estados que componen el Medio Oeste —Illinois, Indiana, Iowa, Míchigan, Minnesota, Ohio, Wisconsin, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Kansas, Nebraska y Misuri— para comprobar como los agricultores han entrado de lleno en la carrera hacia la Casa Blanca. Lo han hecho de la mano de Tim Walz, el gobernador de Minnesota que será compañero de fórmula de la candidata demócrata Kamala Harris, en lo que parece una jugada maestra de cara a garantizarse el respaldo en unos estados que podrían ser clave.

Porque cuando Walz habla de agricultura parece saber de lo que habla. Primero porque trabajó en la granja familiar en Butte, un pequeño pueblo de unos 300 habitantes en el condado de Boyd, en Nebraska, y se acordó de regresar. El año pasado fue a su pueblo, estuvo con algunos de sus ex compañeros de instituto e incluso estuvo en la feria. Y lo contó en X.

Pero también ha estado en el Comité de Agricultura de la Cámara entre el 2007 y el 2019, cuando fue nombrado gobernador. Desde ese puesto ayudó a redactar y sacar adelante varios proyectos de ley relacionados con el sector agrícola en el 2008, el 2014 y 2018.

Como en Galicia, en Minnesota también están preocupados por el relevo generacional. No es un tema menor. Lo dijo el propio gobernador el mes pasado cuando manifestó que «Minnesota se basa en la agricultura. Dependemos de nuestros agricultores para alimentar a nuestras familias e impulsar la economía, y es vital que apoyemos a nuestros agricultores y creemos oportunidades para que nuevas personas se incorporen a la profesión, especialmente en tiempos difíciles».

Kevin Mohatt | REUTERS

Como prueba de esa preocupación está el programa que puso en marcha para ayudar a los jóvenes agricultores o a aquellos que pretendan dar el salto al campo a montar su granja. La iniciativa ofrece créditos fiscales a los que alquilen o se desprendan de tierras de cultivo, maquinaria, ganado u otro tipo de instalaciones; les ayudan a planificar su negocio e incluso da una ayuda de hasta 15.000 dólares a los que compren su primera granja y reúnan unas condiciones elegibles para ello.

Pero es que en Minnesota también se promueven los mercados agrícolas para fomentar la alimentación saludable y la economía de los productores locales que usan prácticas sostenibles en sus campos. En todo el estado y también en las naciones tribales que están dentro de él hay 375 mercados agrícolas y más de 10.000 agricultores comercializando sus alimentos, según los datos del departamento de Agricultura de este estado.

Todas están son pruebas de que el gobernador está pegado a la tierra y a los que viven en, y del, medio rural. Dado que el respaldo de la población de estados tradicionalmente conservadores _baste Iowa como ejemplo_ o la de estados clave del cinturón azul _Wisconsin, Michigan y Pensilvania_  es fundamental, no cabe duda de que puede ayudar al objetivo. Pero es que además podría asegurar el resultado en Minnesota, un estado que Trump había puesto en juego para su bando, aunque este no gana desde las elecciones de 1972 con Richard Nixon al frente. 

Pero más allá de los estados agrícolas  _el interior de California también lo es_, hay que tener en cuenta que las migraciones de ciudades como San Francisco hacia otras de estados conservadores como Texas podrían cambiar muchas más cosas en este escenario. No olvidemos tampoco que el pueblo en el que está la granja familiar de Walz no está lejos de Omaha....