Consecuencias de la sequía: la cosecha de cereal se da por perdida y no se plantará arroz
AGRICULTURA
COAg asegura que la falta de agua asfixia ya al 80 % del campo español y produce pérdidas irreversibles en más de cinco millones de hectáreas de cereales de secano
12 may 2023 . Actualizado a las 09:42 h.El campo se seca. La ausencia de precipitaciones está dejando a los agricultores españoles sin agua suficiente para atender a sus cultivos y las consecuencias, aseguran desde la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), serán catastróficas. A estas alturas ya se da por perdida la cosecha de cereales en prácticamente toda España, mientras que la de los olivos y frutos secos se verá reducida a un 20 % de lo normal. Hay más, en Andalucía han desistido ya de plantar arroz este año y en las explotaciones de frutales de la mitad sur de España temen por la supervivencia de los árboles. COAG calcula que la falta de agua asfixia ya al 80 % del campo español y ha producido pérdidas irreversibles en más de 5 millones de hectáreas de cereales de secano.
Andalucía es, sin duda, la comunidad más afectada por la falta de agua. Apenas ha llovido un 20 % de lo que se considera normal y, actualmente, hay dos comarcas en sequía excepcional, ocho en sequía extraordinaria y 28 más en moderada o severa. Dentro de esta región, es la cuenca del Guadalquivir la que se encuentra en peor situación, pues ya se da por perdida la campaña del arroz ya que los agricultores han desistido de plantarlo.
COAG calcula que en esta comunidad se verán afectados la práctica totalidad de los cultivos, pues la sequía implicará importantes recortes, que podrían ser de hasta el 80 %, en el reparto del agua de los regadíos. A ello hay que sumarle el déficit de agua que estas zonas acumulan desde el año anterior. Así, añade esta organización, en el Bajo Guadalquivir y Cádiz dejará de plantarse el tomate de industria y otros cultivos como zanahoria, brócoli y coliflor, entre otros.« Los árboles necesitan ya riego para poder tener producción en la próxima campaña y están peligrando cultivos de invierno como remolacha, ajos y cebollas, que se perderán si no llueve en los próximos días», añaden en esta entidad.
En toda Andalucía, COAG asegura que se ha perdido la práctica totalidad del cultivo del cereal, que solo sobrevive en las regiones más frescas donde la producción será, como mucho, de un 20 % con respecto a un año normal. También será limitada la producción de girasol, mientras que las leguminosas se encuentran en situación crítica. Lo mismo sucede con los olivos, cuya cosecha se espera que no supere el 20 % de lo habitual. La situación está afectando también a la ganadería en extensiva, porque no hay pastos de primavera y los ganaderos llevan tiempo suplementando su alimentación.
En Castilla-La Mancha la situación también es grave, preocupando especialmente la situación de los cultivos herbáceos. Los frutales, por ahora, subsisten gracias a las reservas de agua. Cataluña, por su parte, se enfrenta a una de las peores sequías de su historia, que está obligando a las comunidades de regantes a establecer limitaciones. De hecho, en las tierras de regadío solo la primera cosecha de cereal será posible, mientras que las de frutales y maíz están pendientes de si llueve.
Catastrófica es la situación del cereal, de la ganadería extensiva y del sector apícola en Aragón. En el Valle del Ebro se ha perdido un 80 % de la cosecha, mientras que en comarcas como Monegros, Baja Cinca y Somontano será imposible recoger la cosecha al no haber llovido. No habrá, tampoco, producción de fruta ni forraje para alimentar al ganado y los agricultores se están planteando plantar solo un 20 % de la superficie destinada al arroz.
La falta de agua está afectando también al ganado, sobre todo al de ovino, que apenas tiene alimento. Eso unido al elevado precio que están alcanzando los forrajes provocará que muchos ganaderos vayan a sufrir para poder alimentaria a sus animales. No se libran tampoco los apicultores. Según COAG, las abejas de esta zona ya estaban débiles por la situación del año pasado y esta sequía está acabando de rematarlas, habiendo cuantiosas bajas en las colmenas.
En Madrid la situación sigue agravándose a medida que pasa el tiempo. En la comarca de Campiña la previsión de cosecha del cereal ronda el 30 %, mientras que en Las Vegas prevén pérdidas del 60 %. «Para los cereales de invierno la situación es altamente preocupante puesto que si no llueve en las próximas fechas se a a perder todas las cosechas», afirman en COAG.
En Castilla y León precisan que llueva cuanto antes para que el cereal ya sembrado y el que se va a plantar puedan desarrollarse sin problemas. A estas alturas, se da por perdida la cosecha en la mitad sur de la comunidad, mientras que la del norte se encuentra en estado crítico. En la Comunidad Valenciana, los cultivos de regadío están teniendo problemas por el alto coste del agua para el riego o por la alta salinidad de los acuíferos. Los apicultores también están entre los más perjudicados, pues no saben a donde van a llevar a sus abejas una vez concluya la floración de cítricos, ya que las región está completamente seca. Lo mismo sucede con los pastos de la ganadería y con el agua que utilizan para beber, pues muchas cuencas están secas.
También en Navarra plantarán este año menos arroz y maíz, además de que la falta de agua está afectando también a los cereales. Las restricciones en el uso del agua podrían afectar a los cultivos hortícolas, sobre todo al tomate y al pimiento, lo que pondrá en riesgo a la empresa agroindustrial de las conservas de esta zona. Y en La Rioja están ya regando el cereal, algo que habitualmente no se hace, y preocupa también el viñedo, que está afrontando su segundo año de sequía. En el País Vasco, en cambio, preocupan los cultivos de remolacha que se acaban de sembrar.
Murcia, por último, es otra de las comunidades donde la situación es especialmente grave, pues la cosecha de cereales se da por perdida. Se espera que los cultivos leñosos sean los siguientes afectados si persiste la sequía. «Se están secando los árboles, estando prácticamente muertos en muchas plantaciones», afirman en COAG, donde también aseguran que se está abandonando la ganadería en extensivo
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