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Hoteles para insectos que ayudan a cuidar del viñedo

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

AGRICULTURA

Cedida

Pone en marcha un plan para recuperar la biodiversidad en su plantación de 24 hectáreas en Pazo do Monte y conseguir así una mejor producción y calidad de la uva

27 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuidar la biodiversidad de un espacio no es solo bueno para el medio ambiente. Tiene también beneficios en la productividad de la tierra y en la calidad de lo que en ella se cultiva. De todo ello son muy conscientes en Mar de Frades, una bodega de Rías Baixas que lleva años trabajando en la puesta en marcha de una plantación de albariño de 24 hectáreas de extensión en la finca de Pazo do Monte. «Es un monocultivo y hemos hecho modificaciones importantes del terreno», cuenta Mónica Chaves, técnica de campo de la firma. Por eso ahora quieren saber cómo sus trabajos han afectado a la biodiversidad de este espacio y poner en marcha toda una serie de medidas que permita recuperarla y, con ello, mejorar la calidad de la uva.

Pazo do Monte se encuentra en un entorno privilegiado, rodeada por el río Umia y la desembocadura del Callón y muy cerca de espacios naturales protegidos por la Red Natura 2000. Era un espacio que siempre estuvo dedicado a la agricultura, pero cuando Mar de Frades la adquirió llevaba años abandonada. La bodega tuvo que llevar a cabo toda una serie de obras para poner en marcha su nueva plantación de albariño «y por eso ahora queremos ver un poco cómo está la situación y si hay posibilidades de aumentar la biodiversidad en la finca», añade Chaves.

Este es el origen del plan de acción de conservación de la biodiversidad, bautizado como Baydiversity, que esta bodega ha decidido poner en marcha con la ayuda de Bayer Cropsciencie y Biodiversity Node. «Queremos saber cómo podemos hacer para mejorar la biodiversidad del viñedo y conectarla con los ecosistema que tenemos alrededor», añade Chaves. El plan ha comenzado por «hacer una foto real de cómo está ahora la situación, qué especies hay presentes, si hay algunas invasoras o cuáles nos pueden ayudar a controlar las plagas del viñedo», afirma.

Primeros resultados

Los primeros resultados del informe revelan que la biodiversidad en el entorno de esta finca no está tan afectada como cabría esperar. «Tenemos muchas aves que nos pueden ayudar a controlar la polilla del racimo o el mosquito verde, para reducir así el uso de fitosanitarios», explica Chaves. Ahora, la bodega cuenta con un plan de acción para poder aumentar esa biodiversidad y conectarla con el entorno del río. «Sabemos que la parte fluvial está bien conservada, porque hay flora y fauna, pero ahora queremos conectarla con el cultivo», explica la técnico.

El principal objetivo, ahora, será diversificar los hábitats, «para que no sea todo un monocultivo». Para ello, se crearán islas de vegetación que permitan que los invertebrados puedan transitar por la finca. Está previsto habilitar cajas nido para murciélagos, que ayudarán a controlar algunas de las plagas del viñedo, y para aves rapaces, con el fin de que se asienten en la finca. Y habrá hasta hoteles para insectos, que ayuden a mejorar la polinización. Otra de las propuestas se refiere a la balsa de riego, donde se generarán islas vegetales flotantes y se pondrán en marcha medidas para que los animales que caigan de forma accidental no queden atrapados. También se tratará de aumentar la biodiversidad en esta balsa, creando un ecosistema acuático, y de restaurar de forma ecológica las zonas más degradadas de la finca.

Con la puesta en marcha de todas estas medidas, la bodega no solo quiere mejorar la biodiversidad de su entorno. Confía en que esto repercuta también en la calidad de la uva. «Lo que hemos realizado es un plan de acción de conservación de la biodiversidad, que pretende ser útil para la empresa porque combina la protección y mejora de la biodiversidad con el aumento de la productividad agrícola y la calidad de la uva», añade Chaves. El programa incluye otros aspectos, como la formación y concienciación de todos los trabajadores, para que colaboren con esta iniciativa, y un proyecto de comunicación y divulgación de los resultados de este proyecto. Porque la idea es que, dentro de un par de años, las tres firmas implicadas en esta iniciativa vuelvan a elaborar un informe sobre cómo ha cambiado la biodiversidad de este espacio en ese período con el fin de comprobar que las medidas que se pusieron en marcha fueron efectivas.