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Pataca de Galicia será distribuida por primera vez por una empresa no gallega

C. Viu, M. Cedrón CARBALLO, REDACCIÓN / LA VOZ

AGRICULTURA

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Patatas Prado, de Coristanco, ha sido adquirida por la vallisoletana Meléndez

03 ago 2022 . Actualizado a las 20:17 h.

Patatas Meléndez, la compañía vallisoletana que acumula un 20 % de la cuota de mercado de la patata en España, acaba de poner una pica en la indicación xeográfica protexida (IXP) Pataca de Galicia. Lo ha hecho con la compra de la gallega Patatas Prado, con sede en Coristanco, una operación dirigida a diversificar todavía más su oferta, ya que la variedad de tubérculo mayoritaria en las fincas de ese concello coruñés es la kennebec.

Para el responsable de Patatas Prado, Miguel Prado, la entrada de un almacén como Meléndez en la IXP es una buena noticia para el sector productor: «Va a contar con el respaldo de una gran empresa que va a ayudar a colocar la patata con IXP en toda la gran distribución». A su vez, el director de la empresa castellana, Javier Meléndez, calificó de «gran hito» para su marca la operación, al poder ofrecer a sus clientes la variedad de patata gallega y ha garantizado que mantendrá «la totalidad de la organización y la estructura de la empresa» en Galicia, detalló en un comunicado recogido por Efe

De ser así, la firma castellana ya podrá empezar a embolsar a finales de este mes los primeros tubérculos de la IXP Pataca de Galicia, procedentes de Verín.

Actualmente, Meléndez comercializa cerca de 180 millones de kilos de patata y cerró el pasado año con más de 90 millones de euros de facturación, con una plantilla de 370 profesionales, que son el contacto con los agricultores suministradores. La empresa prevé concluir este año las obras de su nueva fábrica automatizada y digitalizada de 21.600 metros cuadrados, que tras una inversión de unos 32 millones de euros pretende posicionar como «referente en el sector a nivel europeo a través de la tecnología más puntera y basándose en la máxima eficiencia», según explica la compañía.

Es la primera vez que una empresa no gallega se hace con el distintivo, aunque como ha ocurrido hasta ahora en el almacén de Prado, todo el empaquetado contendrá la referencia de Coristanco, donde ha sido embolsada.

Manuel Quintela es uno de los agricultores de Bergantiños que produce bajo las normas de la IXP y lo hace en cantidad. Está satisfecho con la operación, porque supone mejorar la capacidad de distribución con una compañía más potente que tiene acceso a nuevos mercados. Además, destacó que el hecho de que se mantenga en Coristanco toda la estructura supone una garantía.

Tampoco hay peros desde el Consello Regulador Pataca de Galicia, aunque sí mostraron su sorpresa por una venta de la que no tenían noticia. Sin embargo, el secretario de la organización fue claro: «Se cumpre co sistema e o regulamento, non vai haber problema ningún. O único imprescindible é que estea instalado en Galicia».

Si Meléndez mantiene la razón social de Patatas Prado solo tendrá que informar al consello regulador de que se ha hecho con la propiedad, pero si hace modificaciones, por ejemplo un cambio de nombre, tendrá que tramitar su solicitud para vender los tubérculos con el sello de calidad.

Como otras muchas compañías, la firma castellana se las tuvo que ver hace unos años con el consello regulador, muy vigilante de que no se haga pasar por gallega patata que no lo es, o que no está protegida por la IXP.