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Los canales cortos de comercialización, la fórmula ideal para mejorar los precios de los agricultores y ganaderos ecológicos

Somos Agro REDACCIÓN

AGRICULTURA

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Medio Rural abre en Roma una vía de colaboración con la Asociación Italiana de Agricultura Biológica para impulsar este tipo de producción y la de los productos agroalimentarios de calidad

19 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque no lo crean hay algo que tienen en común las cebollas de Cannara y los pimientos de Herbón. Pues que los dos son productos de calidad. Las primeras, cultivadas en el centro de Italia, a tiro de piedra de Asís, están reconocidas por el Ministerio de Agricultura italiano como producto agroalimentario tradicional (P.A.T.), mientras que los segundos, producto típico de Padrón y su entorno, tienen denominación de origen propia. Y no son los únicos productos agroalimentarios que pueden decir lo mismo. De ahí que Galicia, uno de los territorios de España con mayor número de productos amparados por denominaciones de origen (DOP) o indicaciones geográficas protegidas (IXP), haya querido acercarse a Italia para colaborar en la promoción de los productos de agroalimentarios de calidad, en general, y de los productos ecológicos, en particular.  Por eso, no es extraño que el director xeral de la Axencia Galega de Calidade Alimentaria (Agacal), José Luis Cabarcos, haya encabezado hace unos días una delegación de la Consellería de Medio Rural que visitó Roma para evaluar distintas vías de colaboración con la Asociación Italiana de Agricultura Biológica (AIAB) y para trasladar todo lo que se está haciendo en materia de promoción en esta parte del oeste de la Península ibérica.

En ese intercambio de ideas entre el director xeral y el presidente de AIAB, Giuseppe Romano, uno de los asuntos que se colocaron sobre la mesa  fue la potenciación de los canales cortos de comercialización como una «fórmula ideal» para mejorar los precios que reciben por sus alimentos los agricultores y ganaderos que apuestan por el modo de producción ecológica

Además, hablaron de las líneas de cooperación que se pueden abrir en materia de promoción y protección de productos de calidad (Galicia tiene actualmente 36 «experiencias de calidade» que cuentan con el amparo de una IXP o DOP),  las variedades autóctonas o la formación, otro pilar fundamental para el emprendimiento agrario, base del relevo generacional en el campo. En ese contexto, Carbacos desgranó las medidas puestas en marcha por la Xunta en materia de formación dirigida a agricultores, ganaderos y selvicultores, en sus vertientes reglada y no reglada. 

Durante la reunión también abordaron el tema del uso de la tierra. Ahí el responsable de Agacal aprovechó para dar a conocer las herramientas de que dispone la Lei de Recuperación de Terra Agraria de Galicia, que se está aplicando en la comunidad para poner en valor la tierra infrautilizada. Y habló de aldeas modelo, polígonos agroforestales o agrupaciones de gestión conjunta. Todas ellas son fórmulas de aprovechamiento de terrenos susceptibles de albergar explotaciones dedicadas a la producción ecológica.

Pero la delegación gallega también aprovechó para ver cómo trabajan en el centro Eataly de Roma, el más grande del mundo dedicado a la promoción y comercialización de productos agroalimentarios de calidad producidos en Italia. El director de Agacal destacó que precisamente en Roma hay un restaurante de cocina española, que incorpora referencias agroalimentarias gallegas, sobre todo vinos o quesos. 

Para el director xeral, los centros Eataly son especialmente importantes en el momento de acercar el producto _tanto los amparados por sellos de calidad como los de producción ecológica _ al consumidor. Porque además ofrecen formación gastronómica y de fomento de los productos de calidad, una labora que también trata de impulsar Agacal. Para muestra la iniciativa Espello do rural, un espacio en el que está trabajando la Xunta y que tendrá por sede el pazo de Quián. Ahí conjugarán la promoción de productos de calidad con la formación de los que componen el tejido productivo del sector agroalimentario, con el mundo de la empresa y la comercialización de todos sus productos.

La promoción pasa además por la organización periódica de eventos o la participación en salones como el Gourmet o Alimentaria, por no hablar de otro tipo de eventos culturales.