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En Ourense las setas también son para el verano

A. Mínguez OURENSE

AGRICULTURA

La Voz

Entre los ejemplares que pueden encontrarse estos días en la provincia, los hay comestibles pero también venenosos

12 jul 2021 . Actualizado a las 21:57 h.

Tras una primavera lluviosa, en la zona de Celanova están apareciendo numerosas especies de setas durante estos primeros dias de verano. Algunos de ellos son ejemplares comestibles, pero también lo hay venenosos. De ahí la importancia de tener una formación científica mínima para recogerlas y de esta forma rechazar todo tipo de identificación popular. En caso de duda, los expertos micólogos recomiendan acudir a divulgadores con experiencia. 

Las setas de verano suelen tener menos sabor y estar con mayor frecuencia afectadas por gusanos y ataques fúngicos que merman su calidad gastronómica. En un recorrido por el campo celanovense en la actualidad destaca el Cantharellus cibarius (rebozuelo), amarillo-naranja de dulce olor afrutado y excelente textura. Lo podemos introducir en nuestra cocina en forma de ensalada o, incluso, puede pegar bien en un postre. A causa del calor, suele presentar los bordes del sombrero un poco secos. Otra variedad que podemos encontrar hoy en día es el Boletus edulis (seta calabaza), cuya versión estival es el Boletus reticulatus, con pie carnoso y sombrero oscuro, a veces cuarteado por el exceso de temperatura. Este es un excelente comestible del momento y tiene una gran versatilidad entre los fogones. La Russula virescens (seta de cura), con un característico sombrero verde y láminas y pie blancos, es otra muy buena opción para degustar, aunque tiene escasa carne y es desconocida para muchos porque no está comercializada.

También es habitual de esta época la Amanita rubescens, abundante en los bosques de castaños y robles, aunque en este caso es aconsejable su recogida para aficionados con cierta experiencia por la similitud con otros ejemplares tóxicos. Es además una seta que resulta dañina para la salud en crudo, pero se convierte en una opción comestible una vez se cocina. Destaca estos días en la zona de Celanova una importante presencia de boletales de la variedad erythropus, que son aquellos que tienen una tonalidad rojiza y azulean al cortarlos por el contacto con el aire. Se trata en muchos casos de setas comestibles, aunque no tan apreciadas como sus hermanas de las varidades edulis, pero que suelen recogerse en verano ante la ausencia de otras. En la zona de Bobadela, la antigua carretera de Celanova a Ourense, se pueden ver en los laterales del vial.

También salen setas venenosas en la época estival. Debemos señalar la importante presencia de ejemplares de Amanita pantherina. Se trata de una seta con sombrero de tonalidad verdosa en el que aparecen restos blancos de membrana, como pequeños copos de nieve, aunque podría llegar a carecer de ellos. La carne y las láminas son también blancas, sin olor apreciable. El pie blanco y fibroso presenta el característico anillo en forma de falda en la parte superior y la volva en su parte final. Estas son señales identificadoras de los ejemplares más peligrosos de este género, como la temible Amanita phalloides, que también puede aparecer en verano e incluso en su variedad alba. Hay que tener cuidado con el Paxillus involutus de tonalidad marrón por ser una de las setas más tóxicas.