Agricultura abre el debate sobre una norma de comercialización que regule el mercado del vino a medio y largo plazo

La puesta en marcha de una norma de comercialización dirigida a regular el mercado del vino a medio y largo plazo fue, más allá de informar sobre las gestiones realizadas para que Bruselas movilice fondos para apoyar al sector por el coronavirus covid-19, el eje sobre el que giró la reunión de la mesa sectorial del vino celebrada por videoconferencia y dirigida por la directora general Producciónes y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Esperanza Orellana.

Lo que trataron de avanzar en el encuentro, como explican desde el departamento que dirige Luis Planas, es en el diseño de herramientas para el reequilibrio del mercado del vino a medio y largo plazo, fundamentalmente mediante la puesta en marcha de una norma de comercialización». El objetivo es que esta permita avanzar en la regulación de la oferta respetando las normas a las que obliga la regulación comunitaria y nacional en la materia. Entre las propuestas que se barajaron está la alternativa de reducir los rendimientos productivos o que el sector haga retiradas de producto del mercado para equilibrar esa oferta, «conforme a las iniciativas que planteó en Ministerio en 2019 a partir de una propuesta de la organización interprofesional».

En este sentido, avanzaron desde el Ministerio «se han repasado algunas medidas adoptadas ya en el 2020, como la limitación de rendimientos por hectárea para todas las parcelas de uva de vinificación, la posibilidad de aplicar un incremento del volumen de alcohol que deben de contener los subproductos y la puesta en marcha de una medida de autorregulación por parte de Cooperativas Agroalimentarias de Castilla La Mancha». 

Por último, se ha abordado el debate sobre el importante papel del PASVE como herramienta del sector para ganar en competitividad en el nuevo escenario de la PAC futura y se ha informado sobre los principales aspectos de la reforma de la PAC para este sector.

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