Esto permitirá que los agricultores o perceptores de partidas de desarrollo rural continúen recibiendo ayudas durante ese período. El texto aprobado incluye medidas para prorrogar las ayudas de desarrollo rural o las autorizaciones de plantaciones vinícolas.
16 dic 2020 . Actualizado a las 11:46 h.El Parlamento Europeo dio luz verde este miércoles a disposiciones para garantizar una transición fluida entre la política agrícola común (PAC) de la Unión Europea actual y la futura, y para proporcionar unos 8.000 millones de euros de ayudas a los agricultores. Aprobada por 653 votos a favor, 19 en contra y 22 abstenciones, la nueva legislación europea amplía la aplicación de las normas vigentes de la PAC hasta finales de 2022, lo que permitirá a los agricultores y beneficiarios del desarrollo rural continuar recibiendo ayudas.
Aproximadamente el 30 % de los fondos de estímulo estarán disponibles en 2021, el 70 % restante se liberará en 2022.
De los 8.000 millones de euros, a España le corresponderán 719 millones, a distribuir entre las comunidades autónomas, indicó la eurodiputada socialista española Clara Aguilera, quien destacó en un comunicado que, con este reglamento, «agricultores y ganaderos gozarán de seguridad jurídica para contar con los correspondientes apoyos, hasta la entrada en vigor de la nueva PAC en enero del 2023».
«De aquí al 2023 los agricultores y ganaderos europeos tendrán asegurados sus fondos de la PAC con las mismas normas que tenían hasta ahora. Con este reglamento aportamos un poco de calma en mitad de la tormenta, así como certidumbre y confianza, pero seguiremos trabajando por mejorar el futuro del sector en los años siguientes”, añadió el popular Juan Ignacio Zoido.
El pleno del Parlamento Europeo también dio su visto bueno a un sistema de autorregulación para el aceite de oliva y elimina durante los próximos dos años los recortes para el POSEI, el programa comunitario de apoyo a las producciones agrícolas «fundamental para la regiones ultraperiféricas y las Islas del Mar Egeo, que partían con una propuesta de recorte del 3,9%», precisó Aguilera.
«La nueva legislación de la UE adoptada hoy es de suma importancia para nuestros agricultores, ya que garantiza durante los próximos dos años, seguridad jurídica y ayudas a la recuperación del sector agroalimentario afectado por la crisis», incidió el ponente sobre las normas transitorias de la política agrícola de la UE, la eurodiputada Elsi Katainen, en otro comunicado.
En su opinión, «este es un puente sólido hacia las nuevas reglas, que brinda a los agricultores y a las administraciones nacionales el tiempo necesario para prepararse para la reforma de la PAC posterior a 202'».
Los Estados miembros podrán facilitar la compensación de los agricultores por las grandes caídas de ingresos y las pérdidas provocadas por fenómenos meteorológicos adversos, brotes de enfermedades animales o vegetales o infestaciones de plagas.
SE INCORPORAN MEDIDAS POR LA PANDEMIA
El reglamento incluye nuevas propuestas no previstas en el texto inicialmente. En este sentido, se incorporan medidas covid para atender la situación provocada por la pandemia en el sector agrícola europeo; una prórroga de las ayudas de desarrollo rural; así como prorrogas para autorizaciones de plantación de la vid; y la parte de los fondos destinados al desarrollo rural.
«Brindamos a nuestros agricultores, productores y comunidades rurales un conjunto de herramientas ambicioso y los fondos necesarios para fomentar la resiliencia, la sostenibilidad y la digitalización del sector, de modo que puedan involucrarse más en la adaptación y mitigación del cambio climático», apuntó, por su parte, el ponente de la ayuda europea al relanzamiento económico, Paolo De Castro.
La nueva legislación adoptada hoy amplía en más de tres años la duración de los nuevos proyectos plurianuales de desarrollo rural que se centran en la agricultura ecológica y en medidas respetuosas con el clima y el medio ambiente, incluidos proyectos de bienestar animal.
También forman parte del acuerdo global las reglas acordadas recientemente sobre cómo los agricultores, los productores de alimentos y las zonas rurales pueden utilizar los ocho mil millones de ayudas vinculadas a la crisis de la covid-19 para financiar su recuperación resiliente, sostenible y digital.
Así, al menos el 37 % de los fondos de estímulo irán a los agricultores ecológicos, para medidas ambientales y relacionadas con el clima y para el bienestar animal, y al menos el 55 % de los fondos apoyará inversiones en granjas que contribuyan a una recuperación digital, sostenible y resiliente, y para ayudar a jóvenes agricultores.
Ya solo falta la luz verde del Consejo de la UE para que el reglamento pueda entrar en vigor.
Actualmente, están en curso las negociaciones entre el Parlamento y el Consejo sobre la forma final de la reforma de la PAC posterior al 2022.