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Una investigación para certificar el origen del vino gallego y evitar el fraude

Maruxa Alfonso Laya
maruxa alfonso REDACCIÓN

AGRICULTURA

SANDRA ALONSO

Galivino quiere diseñar una herramienta que permita diferenciar las elaboraciones

07 oct 2020 . Actualizado a las 10:37 h.

¿Se imaginan una herramienta que permita certificar el origen de los vinos de las diferentes denominaciones de origen de Galicia sin tener que mirar la etiqueta? ¿Un sistema que permita evitar el fraude y garantizar la trazabilidad solo analizando el vino? Pues eso es lo que están diseñando los participantes en el grupo operativo autonómico denominado Galivino. La investigación está coordinada por el consello regulador de Valdeorras y en ella participan la Axencia Galega de Calidade Alimentaria, a través de la Estación de Viticultura e Enoloxía de Galicia (Agacal-Evega); la Universidad de Vigo, a través del Grupo de Investigaciones agroambientales y alimentarias; y la Fundación Empresa Universidad Gallega (Feuga). El presupuesto de este programa es de 99.993 euros, financiados en un 75 % con fondos Feader.

El objetivo global de esta investigación es el de diseñar e implementar una herramienta que permita certificar el origen de los vinos gallegos en las diferentes zonas geográficas para evitar el fraude, garantizar la trazabilidad de la producción vitivinícola gallega y poner en valor las variedades autóctonas. El proyecto propone nuevas técnicas y metodologías de trazabilidad para certificar ese origen y proporcionar las claves de su diferenciación por denominación de origen, variedad de uva y añada. Explican en Feuga que existe una creciente demanda de nuevos sistemas de trazabilidad que permitan un adecuado control de la calidad y la veracidad de la procedencia de determinados productos, como puede ser el vino. También, que anteriormente se han desarrollado algunos estudios de autenticación de vinos mediante diferentes estrategias de análisis de datos, «sin embargo, estos métodos no son lo suficientemente robustos», añaden.

En este proyecto se propone el desarrollo y aplicación de métodos combinados y algoritmos de inteligencia artificial para detectar patrones de origen en los datos obtenidos mediante dos vías: los parámetros típicos de calidad de los vinos y los del perfil de volátiles y semivolátiles característicos de las elaboraciones de las diferentes denominaciones. De esta forma, los algoritmos a desarrollar permitirán establecer protocolos de decisión rápidos, robustos y eficaces que certificarán el origen de los vinos gallegos. Para ello será preciso entender las diferencias entre las características analizadas en los vinos y obtener una base de datos con perfiles, la conocida como huella digital de los vinos de cada denominación gallega. Por último, se desarrollará una metodología eficaz y rápida y unos protocolos de toma de decisión para autentificar el origen de los vinos gallegos.

Toma de muestras

El consello regulador de Valdeorras será el encargado de recoger las muestras de vino, en colaboración con los socios de las cinco denominaciones gallegas, y se realizará un estudio y selección de las condiciones óptima de conservación de las mismas. Para ello, se recopilarán muestras en al menos diez bodegas por denominación de origen, con un mínimo de tres botellas por bodega en cada una de las anualidades de duración de este proyecto. Los investigadores desarrollarán algoritmos para detectar patrones de origen en los vinos y los datos serán analizados por redes neuronales artificiales. En Evega harán una caracterización de las muestras mediante la determinación de parámetros estandarizados en vino, mientras que en la Universidad de Vigo se llevará a cabo la extracción, concentración y purificación de compuestos volátiles presentes en las muestras seleccionadas.

El resultado será el desarrollo de un método para conocer el perfil de los vinos de calidad gallegos seleccionados anteriormente con el fin de asegurar su autenticidad. Además, mediante la identificación de patrones típicos de estos productos se ayudará a prevenir la falsificación o manipulación fraudulenta de los mismos. Queda abierta la posibilidad de diseñar modelos específicos para cada denominación, para su control de calidad, y realizar así un mismo análisis en origen y en destino. Pero es que, además, Feuga considera que este proyecto podría posicionar a Galicia al frente del desarrollo de técnicas de autenticidad de origen de vinos.