Continúan las protestas en el campo: «No queremos más cariño, ni que nos entiendan, queremos medidas ya»
AGRICULTURA
Los tractores salieron a la calle esta mañana a Mérida, Murcia, Tarragona y Guadalajara
21 feb 2020 . Actualizado a las 13:46 h.Mientras los líderes de los Veintisiete comienzan la segunda jornada de la complicada negociación de los presupuetos de la UE para el período 2021/2027, el campo no calla. Esta mañana fueron los agricultores de Mérida, Murcia, Tarragona y Guadalajara los que sacaron los tractores a la calle, un arma que no usaron los gallegos porque, como dijeron, «para tempos peores, temos os tractores». La realidad del campo es muy distinta en Galicia, donde la fuerza económica del sector se concentra en la leche (aunque también es potencia en carne, patata o kiwis), de la de Tarragona, donde los palleses se quejan de la competencia desleal que supone la entrada en el mercado de arroz de países extracomunitarios o de aceite de más baja calidad que no reúne los controles sanitarios pertinentes.
Las protestas de hoy se suman a las que comenzaron hace más de un mes en distintos puntos del país para que su voz suene en España, Bruselas o, por qué no, más allá. «No queremos más cariño ni que nos entiendan, queremos medidas ya», manifestó el secretario técnico de La Unión Extremadura, Luis Cortés, desde Mérida. Ahí centenares de manifestantes participaron en una marcha que partió del Carrefour de la capital en la que entonaron lemas como «quieren enterrarnos, pero somos la semilla», «los políticos no nos defienden», «paella española con arroz de Vietnam» o «nos vamos a la ruina». Los manifestantes acabaron entregando sus peticiones al responsable de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández, al que pideron compromisos concretos.
En Murcia fueron centenares los tractores que colapsan el centro de la capital para lanzar «el último grito a la desesperada» y reivindicar unos precios más justos y mejores condiciones que eviten la desaparición del sector y acaben con los «abusos de la distribución» y la competencia desleal.
En Tarragona, la maquinaria partió de diferentes ayuntamientos del Bajo Ebro y Montsia para terminar en Tortosa, donde se concentraron unos 250 tractores.
En Guadajalajara unos 200 tractores se hicieron fuertes en Molina de Aragón, donde recorrieron a marcha lenta un tramo de la N-211. Las protestas no se quedaran ahí. Esta historia, de momento, continuará. Lo de hoy, no deja de ser un capítulo más.