La Evega, con apoyo de la USC, realizó un trabajo de campo en viñedos de Valdeorras
01 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El cuidado de las vides para evitar enfermedades que puedan echar por tierra la cosecha de las denominaciones de origen se convierte en una de las prioridades de las bodegas. Un proyecto en el que participa la Estación de Viticultura e Enoloxía de Galicia (Evega), en colaboración con la Universidad de Santiago y la bodega Godeval, de la D. O. Valdeorras, buscaba definir, valorar y validar prácticas para el tratamiento de enfermedades de la madera de la vid. Entre sus conclusiones, destaca que la adaptación de técnicas vitícolas preventivas se mantiene como indispensable para prevenir este tipo de patologías. Entre las medidas preventivas a llevar a cabo destacan la de realizar podas tempranas, proteger las heridas de la poda y eliminar sus restos.
El trabajo realizado en los viñedos de la bodega Godeval valoró el uso de productos de reciente creación, tanto químicos como compuestos más sostenibles como agentes de biocontrol, para el tratamiento de las principales enfermedades de la madera. Los resultados mostraron que, precisamente, las limitaciones en la utilización de productos químicos para proteger las heridas de la poda -vía de entrada de patógenos causantes de estas enfermedades- fue una de las principales causas del aumento de este tipo de patologías en los últimos años. Es decir, que las condiciones climáticas y la época de poda limitan el empleo del control biológico frente a la lucha química. Por eso, el estudio promovido por la Evega cree es necesario adoptar técnicas preventivas para asegurarse el buen estado de la vid. El proyecto es del grupo operativo autonómico EVID, cofinanciado por el Fondo de Desarrollo Rural (Feader), en el marco del Programa de Desarrollo Rural (PDR) y coordinado por la Fundación Empresa-Universidade Galega (Feuga).
Premio en Canadá
Hace apenas unos meses, la Evega fue galardonada con el tercer premio al mejor trabajo científico presentado como comunicación oral, en el marco del undécimo Congreso Internacional de Enfermedades Raras de la Vid, que se desarrolló en Penticton (Canadá). Ese trabajo, que gira sobre una temática muy similar al desarrollado ahora en Valdeorras, forma parte de una tesis doctoral que se desarrolla en la instalación de Leiro, en colaboración con el Instituto de la Ciencia de la Vid y del Vino (ICVV) de Logroño.
En este estudio se investigaron los porcentajes de infección por patógenos fúngicos asociados a las enfermedades de la madera de la vid, que se producen de forma natural tras la realización de la poda. El análisis se llevó a cabo en seis viñedos gallegos localizados en los municipios ourensanos de Leiro y del Barco de Valdeorras, y en el pontevedrés de Ribadumia, mediante la técnica de la secuenciación masiva. Los resultados del proyecto incidían en que se recomienda la realización de una poda temprana entre los meses de noviembre y febrero, en combinación con otras medidas de control con el fin de reducir al máximo las infecciones de los hongos.
Jornada en Leiro
Las conclusiones de ambos estudios se presentaron en una jornada sobre prevención y estrategias del control de las enfermedades de la vid y a la que asistieron profesionales del sector.
