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Algo está pasando con el agua

Fran Armesto

AGRICULTURA

Santi M. Amil

La demanda mundial de agua dulce no ha dejado de crecer y la previsión es que siga en aumento mientras los recursos están mostrando señales de agotamiento

19 dic 2018 . Actualizado a las 10:22 h.

Para el 2050 se espera que la población mundial aumente hasta los 9,3 millones de personas. Para alimentar a esta población será necesario incrementar la producción un 70 % y, en consecuencia, también el consumo de agua.

La escasez de agua afecta actualmente a alrededor del 40 % de la población mundial y se estima que 663 millones de personas no tienen fácil acceso a fuentes de agua potable. Esta es la causa de muchas enfermedades que sufren los países más pobres.

La agricultura determina aproximadamente el 70 % del consumo total de agua dulce en el mundo y en la mayoría de los países menos desarrollados puede sobrepasar el 90 %. Sin embargo, es la actividad donde más pérdidas se producen por evaporación o rotura de canalizaciones, por ejemplo, mientras que la tecnología apenas ha logrado implantarse (riego por goteo, temporizadores, etcétera). Los sistemas de riego siguen siendo similares a los empleados hace siglos. Sin medidas que mejoren la eficiencia, se espera que el consumo de agua para uso agrícola a nivel mundial aumente alrededor del 20 % en el año 2050.

La mitad de los trabajadores del mundo lo hacen en sectores relacionados con el agua. Así, se estima que depende en gran medida del agua el 95 % del empleo en el sector de la agricultura, el 30 % en el sector de la industria y el 10 % en el sector servicios. Por ejemplo, la industria dedicada a procesar alimentos y bebidas emplea a 22 millones de personas (de los cuales son mujeres aproximadamente el 40 %), mientras que en la industria química y farmacéutica trabajan unos 20 millones.

NUEVOS PATRONES DE LLUVIA

En lo que llevamos de otoño las lluvias fueron noticia en numerosas ocasiones y en muchos lugares de todo el mundo por las inundaciones que están causando. Conforme la población humana se hace cada vez más urbana, parece que la lluvia está dejando de ser el regalo caído del cielo que regaba los cultivos, mejoraba el rendimiento agrícola y reverdecía los campos, para convertirse en una penalidad para pueblos, ciudades, carreteras, vehículos y comercios. Detrás de algunas de estas manifestaciones meteorológicas está la sospecha de que el cambio climático está afectando a los patrones de lluvia de muchas regiones de nuestro planeta y fomenta el incremento de episodios meteorológicos extremos (en este caso el de lluvias torrenciales). 

UN REGALO DEL CILO 

En los últimos años, cada vez más países, comunidades y personas están desarrollando proyectos y acciones para aprovechar las lluvias como fuente de agua. Al fin y al cabo es un recurso que cae del cielo. Aunque la lluvia no está formada por agua potable (debido a que, por ejemplo, arrastra la contaminación atmosférica), puede ser un recurso para conseguir agua de uso doméstico. Y es que la mayor parte del consumo que se realiza en una vivienda (unos 150 litros diarios por persona) se emplea para labores de limpieza (lavadora, lavavajillas, etcétera), higiénicas (inodoro) y riego. Por eso algunos edificios ya recogen y canalizan hacia depósitos el agua que cae sobre sus tejados. De esta forma, en un solo día de chubascos se puede llegar a conseguir miles de litros. Tampoco es complicado añadir un sistema de depuración que permita utilizarla también para beber y cocinar. Algunos expertos han calculado que incluso en lugares donde las lluvias escasean las pocas precipitaciones podrían servir para satisfacer las demandas de consumo. 

Mares que desaparecen

¿Barcos en el desierto? A poco más que un océano de arena ha quedado reducido el mar de Aral
¿Barcos en el desierto? A poco más que un océano de arena ha quedado reducido el mar de Aral Zhanat Kulenov

Hace unos 50 años los dirigentes de la antigua Unión Soviética decidieron desviar las aguas de los dos ríos principales de Asia Central para convertir tierras desérticas en zonas de cultivos. Asumieron sin pudor alguno que el mar de Aral, que actualmente se encuentra entre los estados de Kazajistán y Uzbekistán, terminaría por desaparecer. Querían producir arroz, cereales y convertirse en los primeros productores mundiales de algodón. Lo consiguieron gracias a los regadíos, pero el precio se ocultó durante décadas, hasta que en 1985 Mijaíl Gorbachov decidió revelar la tragedia ambiental que habían sufrido.

Antes de la intervención era el cuarto lago mayor del mundo, pero en el 2007 su tamaño se había reducido a la décima parte. En esos mismos años la salinidad y la contaminación aumentaron. Las especies de peces se redujeron de 32 a 6, así que las pesquerías comerciales desaparecieron a mediados de los años ochenta y se perdieron 60.000 empleos. Es uno de los mayores desastres ambientales de nuestra época.

Hacia finales del siglo pasado comenzaron los intentos por mejorar su futuro, pero la situación ecológica sigue empeorando. Las mejoras conseguidas, sin embargo, deberían animar los trabajos de recuperación así como servir de ejemplo sobre lo que deberíamos evitar, pues otros grandes lagos, como el Chad, en África Central, comienzan a sufrir los mismos síntomas. Este gran lago se extendía por unos 26.000 kilómetros cuadrados hacia los años sesenta del siglo pasado, pero actualmente tan sólo ocupa unos 900. La extracción de agua para regadíos y para mantener a millones de habitantes es lo que está provocando su extinción, que se calcula sucederá dentro de un siglo. 

Actividades

Educación en la web

El IHE (Institute for Water Education) es la institución más importante del mundo dedicada a la educación en temas relacionados con el agua. Su página web está en inglés, pero si te atreves a fisgonear se encuentra en esta dirección:

Para curiosear

La Fundación Aquae posee una página web con recursos sobre el agua. Un ejemplo es el enlace titulado «10 cosas que deberías saber sobre el agua en el planeta tierra» (https://bit.ly/1q0kpq3), en el que responden a cuestiones como si cuesta lo mismo un litro de agua en todos los lugares del planeta o si el cambio climático afecta al agua que bebemos.

Trabajo de hemeroteca en La Voz de Galicia

Utiliza el buscador que te ofrece la versión digital de nuestro diario para descubrir las noticias más recientes sobre la gestión del agua. Muchos expertos dicen que en el futuro los conflictos por el petróleo se sustituirán por otros sobre el acceso al agua potable. ¿Cuál es tu opinión?

Para investigar en Internet

Muchos lagos y mares del mundo están desapareciendo. Averigua la situación de estos ejemplos: Tonle Sap en Camboya, Mono en Norteamérica, Chalapa en México. En nuestro país ya ha sucedido algo parecido. Más del 50 % de los humedales que teníamos ya no existen y otros están en peligro. Investiga, por ejemplo, la historia de uno de nuestros parques nacionales, las Tablas de Daimiel. En nuestras tierras tenemos ejemplos de humedales que deberíamos conservar como las gándaras de Budiño o el complejo húmedo de A Limia, donde quedan los restos de la antigua laguna de Antela.