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Las granjas gallegas aseguran mucho sus animales pero poco sus cultivos

Xoán Ramón Alvite Alvite
X. R. Alvite REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS AGRO

RACHEL MUMMEY | REUTERS

Aunque crece la contratación, solo una de cada diez hectáreas de terreno está protegida ante inclemencias meteorológicas

12 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La climatología sigue sin estar considerada como un factor de riesgo para la mayoría de los agricultores y ganaderos gallegos. Al menos no lo suficientemente importante como para que consideren necesario protegerse de sus consecuencias a través de un seguro.

Lo demuestra el hecho de que tan solo 673 de las 25.000 explotaciones ganaderas existentes en la comunidad —6.000 lácteas y otras 19.000 cárnicas— cuentan con algún tipo de póliza que proteja sus cultivos ante un período prolongado de sequía como el registrado el año pasado o ante temporales de viento y lluvia similares a los que acostumbran a afectar a la comunidad.

Porque, aunque la producción y la superficie asegurada han crecido más de un 50 % durante el cuatrienio 2019-2022, el número de pólizas que se suscriben sigue siendo reducido en comparación con el importe del peso específico del sector.

En este sentido, según los datos facilitados por la Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados (Agroseguro), durante el ejercicio 2022 estaban aseguradas en Galicia un total de 36.407 hectáreas entre cultivos forrajeros —maíz en su mayor parte— y cultivos herbáceos extensivos, sobre una superficie agraria útil (SAU) total de más de 440.000 hectáreas. También contaban con protección otras 2.986 hectáreas dedicadas a la obtención de uva para vino —la comunidad cuenta con casi 30.000 inscritas— y 287 hectáreas más cuya orientación principal era la del cultivo de hortalizas. En total, el volumen de producción incluido en las pólizas superó ligeramente las 640.000 toneladas con un capital asegurado que rondaba los 69,5 millones de euros. 

Notablemente inferior

Esta cantidad resulta, sin embargo, notablemente inferior al valor de los bienes cubiertos por el sector ganadero —casi 870 millones de euros—, un ámbito productivo en el que la contratación de seguros sí resulta mayoritaria. Lo confirman desde Agroseguro que apuntan a que la práctica totalidad de las granjas gallegas cuenta, a día de hoy, con una póliza pecuaria que cubre el costo de la retirada y destrucción de animales muertos. En total, más de 37,6 millones de animales están incluidos, un 14 % más que durante el ejercicio anterior y un 30 % por encima de los que figuraban asegurados en el 2019.

Importante ha sido también el crecimiento experimentado por el «seguro vacuno de reproducción y producción», uno de los más contratados, que ya protege al 51 % de las vacas gallegas ante situaciones tan variadas como el sacrificio obligatorio debido a campañas de saneamiento, la fiebre aftosa, la encefalopatía espongiforme o el ataque de animales salvajes. Unas contingencias que se pueden completar con otras muchas como las derivadas de cualquier tipo de accidente, muerte súbita, mamitis o incluso por dolencias menos habituales como carbunco o meteorismo. Tal es la relevancia de estas pólizas que el capital cubierto, a día de hoy, se aproxima a los 610 millones de euros. 

Baja por el cierre de granjas

Una cantidad elevada a la que se llega, según apuntan desde Ucoga, a pesar de la reducción del 3 % experimentada por el número de pólizas debido al cierre de granjas y al 6 % de la subida del importe de las primas. «Llama la atención la subida de primas generalizada que, año tras año, registran líneas como la de retirada de cadáveres a las que Agroseguro es incapaz de buscar rentabilidad. En este sentido, desde Ucoga siempre hacemos el llamamiento y reivindicación para que no paguen siempre los mismos y busquen culpables en empresas proveedoras u otras zonas donde se acumulan las perdidas, desde luego no en Galicia ni mucho menos en el sector vacuno», apunta Iván Novo, director general de esta correduría vinculada a las cooperativas agrarias gallegas, líder absoluto en el campo gallego con una cuota de mercado próxima al 70 %. En cuanto al escaso éxito que registra la contratación de pólizas agrícolas en Galicia, desde esta entidad se apunta a la falta de divulgación y a las fechas en las que finaliza el período de contratación —antes de que se siembren la mayoría de fincas de maíz en la comunidad— como las principales causas que lo justifican.

Asegurar la alimentación

«Se trata, en cualquier caso, de líneas muy interesantes que, por un precio muy razonable permiten asegurar algo tan preciado en los tiempos que corren como es el forraje y, por tanto, la alimentación del ganado durante todo el año», apunta el responsable de Ucoga.