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Los primeros cachelos gallegos en conserva

SOMOS AGRO

MARCOS MÍGUEZ

Francisco y Sonia, de la firma Lúa de Dexo, acaban de lanzar al mercado los primeros tarros con las patatas que cosechan en Oleiros, listas para ser consumidas

20 jun 2022 . Actualizado a las 09:44 h.

Ya huele a San Juan. A días largos y noches cortas. A sardinas que mollan o pan. A pimientos de Padrón que cada vez pican menos. Y no nos podemos olvidar de los cachelos. Estos días salen al mercado los primeros en conserva. «Estuvimos buscando, pero no encontramos otros iguales, con su piel y todo», destacan Francisco Gil y Sonia Rodríguez mientras me muestran los primeros tarros de cristal que acaban de recibir. Son los propietarios de Lúa de Dexo, una explotación agrícola artesanal ubicada en Dexo, Oleiros, el municipio más rico de Galicia. Lo que ellos persiguen es que sus productos sean también los más ricos. «Las patatas son Kennebec de producción propia. Plantadas aquí. Las cocinamos en una conservera que se llama Amorodo y que está ubicada en Soutelo de Montes y que se dedican a productos muy seleccionados», relatan. Es decir, los cachelos recorren casi 300 kilómetros de norte a sur de Galicia (entre ida y vuelta).

Llevan agua, sal y vinagre, necesario para conservar. Hicieron varias pruebas de cocción que dieron a probar a personas cercanas. Pero fue Mercedes, la madre de Francisco, la que dio el definitivo visto bueno. Esta mujer de Neda tiene 72 años, cocina como los ángeles, y tiene callos en las manos de tanto cocer cachelos. Cuando ella dijo que estaban geniales, no hubo más que investigar. «Son muy fáciles de preparar. Los echas en una olla con el propio líquido y en cinco minutos los tienes listos para comer», explica. Cada tarro lleva medio kilo, que da para una buena cena para dos personas, o cuatro si no comen demasiado. Francisco y Sonia dejaron los trabajos que tenían para apostar por su propio proyecto. En poco tiempo consiguieron que sus tomates sean los más buscados de occidente y no dejan de pensar en nuevas vías de negocio. «La comida precocinada creció muchísimo. Pensamos que hay un hueco para productos de calidad. Nos va más rápido la cabeza que las manos. Hay que hacer todo, hasta el diseño de la etiqueta, el registro sanitario...», relatan. Como a ganas no les supera nadie, ya preparan próximos lanzamientos, como una salsa de tomate amarilla «con un sabor espectacular», un pisto multicolor o una acelga arcoíris. «También trabajamos en una línea de conservas de autor que llevan productos nuestros con recetas de cocineros con los que trabajamos», avanzan. Por el momento solo tiene los cachelos, los primeros de Galicia en este formato. Los encontrarán en tiendas especializadas a un precio de venta al público de entre 5 y 6 euros con la marca Lúa de Dexo.

EL ÉXITO DEL ARROZ

El restaurante Samaná de A Coruña acaba de poner en marcha sus segundas jornadas dedicadas al arroz. «Solo el primer fin de semana despachamos más de 200», comenta el propietario del local situado en la calle Rosalía de Castro. Un buen arroz es de los platos que más aprecia la gente y que resulta más complicado encontrar. El punto perfecto es siempre difícil. Probé uno de gamba roja y calamar y me quedé con ganas para la próxima vez de tomar el meloso de tres tomates y huevo a 65 grados. Hay tiempo hasta final de mes. No todo van a ser sardiñas e cachelos.