UPA defiende que los fitosanitarios se utilizan de forma sostenible en Europa
SOMOS AGRO
La Unión de Pequeños Agricultores coordina un informe del Comité Económico y Social Europeo sobre la directiva del uso sostenible de plaguicidas
04 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Los agricultores europeos realizar un uso sostenible de los productos fitosanitarios. Esta es una de las conclusiones del informe elaborado por el Comité Económico y Social Europeo (CESE) y coordinado por la Unión de Pequeños Ganaderos y Agricultores (UPA). La organización agraria ha evaluado la directiva europea 2009/128/EC y ha concluido que la utilización de estos productos para luchar contra las enfermedades de las plantas y garantizar la producción de alimentos es «razonable y sostenible».
«La directiva ha contribuido a que el uso de los fitosanitarios en Europa sea cada vez más lógico y adecuado», asegura José Manuel Roche, director de Relaciones Internacionales de UPA y ponente de este documento informativo que analizó en detalle la aplicación de esta directiva en cinco países: España, Irlanda, Suecia, Bulgaria y Croacia. El estudio concluye también que la manipulación y el tratamiento con fitosanitarios en el campo ha vivido avances significativos desde el año 2009. Sin embargo, también afirma que sigue habiendo cierta falta de conocimiento sobre las normativas que rigen su aplicación en los usuarios finales. Es por ello que se aconseja reforzar los sistemas de monitorización para analizar el cumplimiento de los objetivos de reducción de fitosanitarios.
El documento coordinado por UPA asegura que los agricultores se enfrentan a la presión de producir más alimentos haciendo un uso cada vez menor de herramientas como los fitosanitarios, cuando las alternativas para hacer frente a problemas como las plagas son escasas y caras. «El 81 % de los agricultores encuestados por el CESE aseguran que sufren presiones económicas para usar los fitosanitarios e incrementar su rentabilidad», argumenta UPA. Al mismo tiempo, los productores ven cómo se incrementan las importaciones a Europa de productos de terceros países «que no se caracterizan precisamente por hacer un uso sostenible de los fitosanitarios. El principio de reciprocidad en los acuerdos con otros países no se está cumpliendo», asegura José Manuel Roche.
Es por ello que el sindicato insta a las instituciones europeas a crear un marco normativo armonizado e insiste en que todas las políticas que está proponiendo la UE son normativas que afectan a los agricultores de forma directa y que pueden hacerlo de forma negativa de no aplicarse con lógica. «Todos queremos una Europa más limpia y sostenible, y los agricultores somos expertos en producir más con menos, pero es fundamental que se reconozca la dificultad de nuestro trabajo y la necesidad de garantizar unos precios justos para nuestros productos», concluyó Roche.