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UU.AA. le declara la guerra al nuevo pollo vegetal

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS AGRO

La formación denunciará ante la oficina de Consumo a Heura Foods y Supermercados Aldo por considerar fraudulenta la denominación de este producto

28 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Los Bocados de Polo 100 %Vexetal Mediterráneos que la empresa Heura Foods pondrá a la venta en más de 300  Supermercados Aldi son, en realidad, «un producto vexetal ultraprocesado que non ten relación algunha co polo», aseguran los responsables de Unións Agrarias. El sindicato anunció su intención de denunciar ante la Oficina de Consumo de la Xunta lo que considera un engaño a los consumidores, pues se está vendiendo un producto «cunha denominación fraudulenta».

UU.AA. está convencida de que este engaño debe ser perseguido y sancionado por Consumo, además de que el producto debe ser retirado de los lineales. En su opinión, las industrias que elaboran este tipo de productos son conscientes de que son de creación industrial y de que están basados en vegetales y grasas de dudoso origen, por lo que generan temor entre los consumidores. «Para salvar estas reticencias, deben disfrazalos para normalizalos e lograr a aceptación dos consumidores», argumenta la organización agraria. Es por ello que «simulan hamburguess ou salchichas ou, como nesta ocasión, que foron máis aló e quixeron disfrazarse de polo», critican. 

La organización pidió también al Ministerio de Agricultura que investigue estas prácticas, por si pudiesen considerarse práctica desleal en la cadena agroalimentaria, «por prexudicar os intereses dos produtores de aves e por enganar aos consumidores chamando polo a al que, sinxelamente, non é polo». Y recuerda que el sector agrícola y ganadero lleva años luchando por un etiquetado más transparente, que reconozca el trabajo de los productores y permita a los consumidores elegir libremente y sin engaños. «Estas actitudes son unha fraude e non se deben consentir. España e a UE deben actuar de inmediato», argumenta. Según Unións Agrarias, Galicia cuenta con cerca de 700 explotaciones avícolas que en el último año, y fruto de los efectos de la pandemia en el consumo, perdieron más de 3,5 millones de euros, lo que supone unos 5.000 euros por granja.