Se elaborará durante los próximos años y se mantendrá actualizado cada cinco
20 nov 2020 . Actualizado a las 09:35 h.El Ministerio para la Transición Ecológica tiene ya listo el borrador de la Estrategia para la Conservación y Gestión del Lobo en España, que fue presentado al grupo de trabajo del que forman parte la Administración General del Estado y las Comunidades Autónomas con presencia de esta especie. En este documento se apuesta por incluir a este animal en el listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, pero también se prevé la elaboración de censos actualizados, el próximo entre el 2021 y 2022, que deberán ser renovados cada cinco o seis años. Además, habrá ayudas para aquellos casos «debidamente justificados», en los que el animal ocasione daños.
Incluir al lobo en el listado de especies en régimen de especial protección en toda España —actualmente solo lo está en las comunidades situadas al sur del Duero— es una medida no muy popular entre los ganaderos de la cornisa cantábrica que, año tras año, se ven afectados por los daños que ocasiona esta especie. Pero el ministerio parece tener claro que esta es la única forma de lograr la conservación, gestión y restauración de poblaciones viables de lobos como parte integral de los ecosistemas españoles. Para garantizar la conservación a largo plazo de esta especie, propone alcanzar las 350 manadas de lobo en España en el año 2030, reducir la persecución ilegal de este animal y aumentar entre un 10 y un 20 % su área de distribución actual.
Revisión y enriquecimiento de la propuesta
Aunque la estrategia todavía no está cerrada, pues después de esta primera puesta en común se espera continuar con el proceso de revisión y enriquecimiento técnico con aportaciones de todos los agentes implicados en la gestión del lobo en España, todo parece indicar que este animal pasará a ser considerado una especie a proteger. Pero, a cambio, Transición Ecológica sí ha recogido algunas de las demandas del sector ganadero. La primera, realizar un nuevo censo de la especie durante los dos próximos años y mantenerlo actualizado cada cinco o seis. Actualmente, el último elaborado es el del 2012-2014 y se llevó a cabo con metodologías diferentes a los anteriores, lo que impide comparar sus cifras. En total, en esos años, se censaron 297 manadas de lobo en España. Desde entonces, se ha constatado una expansión reciente de la especie, fundamentalmente hacia el sur peninsular, y su dispersión demográfica en el noroeste.
Otro de los puntos que recoge la nueva estrategia es hacer un seguimiento de los grupos del lobo. En este sentido, propone una serie de directrices comunes de gestión para cuando se observe un incremento notable en el número de especímenes en un determinado entorno que pueda generar tensiones. Algo que los ganaderos consideran imposible de llevar a la práctica, pues consideran que no se pueden compatibilizar la conservación de la especie con la realización de batidas. La gestión, en estos casos, se llevará a cabo siempre en el contexto del equilibrio ecológica. Por último, el documento incluye la puesta en marcha de líneas de ayudas, pero solo en aquellos casos «debidamente justificados».
