Un sector expuesto a las enfermedades profesionales y donde los siniestros siguen creciendo

Según el monográfico sobre el sector forestal elaborado por el Ministerio de Agricultura y UGT, el número de accidentes laborales que registra el sector forestal en España no ha dejado de crecer en los últimos años. Si en el 2017 hubo 2.924 siniestros, en el 2018 esta cifra se incrementó hasta los 3.058. La principal conclusión que extraen los autores del estudio es que los datos no varían, lo que significa que las medidas preventivas no se están aplicando correctamente o que la formación que se está impartiendo no llega a los operarios. Pero es que, además, este es uno de los sectores con mayor incidencia de accidentes laborales, pues de cada 100.000 personas trabajando, 15.434 sufre uno de estos siniestros.

Ese mismo documento también establece que, de los más de 3.000 siniestros que hubo en el ámbito del sector forestal, 46 fueron graves y ocho de ellos mortales. El trabajo con herramientas es el que ocasiona la mayoría de estos accidentes, seguido de las tareas que implican movimiento. Además, la mayoría de las heridas que se registraron, más de 1.200, fueron dislocaciones y esguinces, seguidas de heridas superficiales (1.121 casos). Pero también hubo un número importante de accidentes con fracturas de huesos, un total de 256, y otros once en los que hubo que realizar amputaciones traumáticas.

El sector forestal es también uno de los que tiene mayor incidencia de las enfermedades profesionales, pues sus trabajadores están, en la mayoría de los casos, expuestos a los agentes físicos. Hay problemas de sordera, por el ruido de la maquinaria, de quemaduras por radiaciones solares y de sufrir las inclemencias del frío y del calor, pero también del viento y de las tormentas eléctricas.

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