Mercaproximidade dio salida a tres millones de kilos de la patata excedentaria de A Limia

Cuatro millones de kilos de patatas de A Limia se quedaron sin clientes el día que el estado de alarma obligó a cerrar las puertas a bares y restaurantes. Inmediatamente, los agricultores y almacenistas empezaron a movilizarse para tratar de dar salida a una producción de gran calidad, que se iba a echar a perder. Y fue entonces también cuando Medio Rural decidió poner en marcha Mercaproximidade, un sistema para acercar la gran distribución a los productos de los pequeños agricultores y ofrecer así una salida comercial a los que se habían quedado estancados por la emergencia sanitaria. Explican en la Xunta que la iniciativa fue todo un éxito. Y es que, además de implicar a todas las cadenas de supermercados que operan en la comunidad, a ella se han sumado 450 agricultores, ganaderos e industrias como proveedores. En el caso de la patata de A Limia, Mercaproximidade permitió poner en los mercados más de tres de los cuatro millones de kilos que había almacenados.

El conselleiro de Medio Rural, José González, y el director xeral de Gandaría, José Balseiros, mantuvieron ayer una videoconferencia con miembros de la asociación de Empresarios, Gandeiros e Agricultores da Limia (Adegal) para valorar los resultados de Mercaproximidade. Esta fórmula de venta alternativa consiguió movilizar «máis de tres millóns de quilos de tubérculo dos catro millóns depositados nos almacéns», aseguró González, quien también agradeció a los productores «o seu labor nestes tempos de dificultades» para garantizar el abastecimiento de alimentos. Valoró, además, su solidaridad, pues parte de la patata movilizada por la entidad fue donada con fines sociales. El conselleiro asegura que la mayor parte de esos tres millones de kilos de patatas a los que dio salida Mercaproximidade fueron comercializados por la diez cadenas de distribución que sumaron a la red.

Labor solidario

Pero el programa tenía también una vertiente solidaria. La Xunta efectuó compras de productos parta abastecer a hospitales, cocinas económicas, bancos de alimentos y entidades sociales de toda España. En concreto, donó «case 133 toneladas» de tubérculo para ponerlo al alcance de los menús solidarios o de la familias más vulnerables. A las otras empresas que compraron también patata para entidades sociales hay que añadir las más de 160 toneladas cedidas por un productor de forma desinteresada.

Mercaproximidade se completa con una campaña de promoción de los productos, titulada #Voudesuperfeirón, que sigue visible en los establecimientos comerciales y que también quiere ayudar a los consumidores a darse cuenta de que comprando productos locales ayudan a revitalizar el medio rural gallego.

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