El conselleiro de Medio Rural, José González, reclamó en Bruselas que el etiquetado de la miel incluya también los porcentajes
29 ene 2020 . Actualizado a las 10:35 h.España ha presentado este lunes en el consejo de ministros de Agricultura de la Unión Europea la declaración tripartita sobre la futura Política Agrícola Común (PAC) que acordó en diciembre junto a Francia y Alemania. Algunos países como Hungría, Portugal o Irlanda han recibido con los brazos abiertos el texto.La mayoría de los ministros del ramo han secundado la propuesta que ha compartido el ministro español, Luis Planas, aunque algunos han aprovechado su turno de palabra para matizar su apoyo. Lo que sido unánime es la importancia de mantener un presupuesto que esté a la altura de la ambición medioambiental del actual Ejecutivo comunitario, idea que ha repetido el comisario Janusz Wojciechowski en la rueda de prensa posterior al consejo.
Planas ha insistido en que la PAC debe tener un presupuesto reforzado para alcanzar los objetivos del Pacto Verde y ha hecho especial hincapié en dos conceptos: flexibilidad y simplicidad. «Flexibilidad para que todas las regiones puedan jugar su papel y simplicidad para que sea más sencillo para el agricultor o ganadero y para la evaluación de los planes estratégicos», ha matizado.
Aranceles americanos
Los ministros del ramo también se han reunido con el secretario de Agricultura de Estados Unidos, Sonny Perdue, durante el almuerzo. A pesar de que no estaba en la agenda, han aprovechado la ocasión para trasladarle su malestar por los aranceles a productos agroalimentarios europeos como penalización por los subsidios ilegales de algunos países del bloque a Airbus.
A pesar de la buena voluntad del americano por hablar del asunto, el comisario Janusz Wojciechowski ha reconocido que se trata de un asunto externo a su cartera, aunque ha celebrado la actitud de su colega. Así, ha intentado calmar los ánimos y ha recordado que la «balanza comercial sigue siendo positiva para Europa, ya que la exportación a Estados Unidos se cifra en 22.000 millones anuales». El ministro español, por su parte, ha insisto en que la UE debe utilizar «los instrumentos a su alcance» si Washington decide elevar los aranceles al sector.
Etiquetado de la miel y bienestar animal
Eslovenia y Portugal han presentado una declaración para reformar la normativa sobre el etiquetado de la miel, para que se refleje mejor la composición de la misma si es producto de una mezcla de mieles de diferente origen. A la medida se han adherido 15 países más, entre ellos España.
El ministro de Agricultura ha estado acompañado en Bruselas por el conselleiro de Medio Rural, José González Vázquez. En declaraciones para La Voz, ha insistido en la necesidad de recoger en la etiqueta el país de procedencia de la miel. Sin embargo, considera que «la posición de la Unión Europea se queda un poco corta». Y es que el gallego cree que es un error que no aparezca el porcentaje. «Para Galicia es importante porque hacemos una miel excelente. Aplaudimos este primer paso, pero creemos que debería de mostrarse también los porcentajes».
El comisario del ramo ha señalado que el debate ha llegado en el momento oportuno y se ha comprometido a estudiar las implicaciones que tendría la propuesta a nivel comercial. «La decisión de reabrir la directiva para modificarla solo se tomará una vez que esté listo el programa ‘De la dehesa a la mesa»”, ha concluido.
En el consejo también se ha estudiado un etiquetado de bienestar animal voluntario a nivel europeo, propuesta lanzada por Alemania, a la que se han adherido varios socios europeos, entre ellos España. Algunos países como Dinamarca u Holanda ya tienen una normativa a nivel nacional y Berlín busca «dar solución e información a los consumidores concienciados con el bienestar animal más allá de lo estrictamente legal». Bruselas ha tomado nota y se ha comprometido a estudiar los diferentes puntos de vista expresados en este consejo para la posible creación de un esquema de etiquetado. El conselleiro ha aplaudido la medida y ha dicho estar encantado porque los ganaderos gallegos «son referentes en bienestar animal y todo lo que sea trasladar esta información a los consumidores, entendemos que es positivo».