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Los dueños de monte cifran el coste de limpiar las franjas en 50 millones al año

María Santalla REDACCIÓN / LA VOZ

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Desbroce en A Freixeira
Desbroce en A Freixeira cedida

El desbroce y la retirada de árboles en las zonas de seguridad afectan a 150.000 hectáreas

25 jun 2019 . Actualizado a las 10:56 h.

La Xunta ha intensificado en los últimos años el control de la limpieza de montes con el fin de evitar incendios, intensidad que redobla en aquellas áreas próximas a viviendas especialmente tras los graves incendios de octubre del 2017. La ley establece las distancias mínimas en las que el monte debe mantenerse limpio, y un convenio entre la Xunta, la Fegamp y la empresa pública Seaga trata de conseguir que esa normativa se cumpla. En el marco de ese acuerdo, Medio Rural y los concellos se habían marcado el reto de limpiar 4.500 hectáreas de monte entre los meses de mayo y junio, un reto que a ocho días para el fin del plazo parece difícil de cumplir.

Para los propietarios forestales reunidos en la Asociación Forestal de Galicia, los requisitos que marca esa ley son difícilmente asumibles. En su reunión anual, celebrada hace unos días, pusieron cifras a las exigencias que la normativa marca en las proximidades de las viviendas y de los núcleos de población: mantener a punto estas redes secundarias implicaría, dicen, cortar el arbolado y desbrozar anualmente unas 150.000 hectáreas de terreno, y esto supondría un coste cada año de alrededor de 50 millones de euros.

Estas cifras son, para los dueños de monte, prácticamente inasumibles, de ahí que aboguen por una serie de cambios normativos que plantearon ya en la Dirección Xeral de Defensa do Monte de la Xunta. En primer lugar, la asociación forestal apuesta por la territorialización de las medidas de prevención. Entienden sus socios que los criterios no pueden ser los mismos en todas las áreas, puesto que hay determinadas zonas con problemas estructurales de incendios, como es el caso, apuntan, de la provincia de Ourense, y otras en las que el riesgo es menor.

Consideran que la Administración debería asumir con fondos públicos las tareas de limpieza

Los dueños de montes van más allá y creen que la Xunta debería poner en marcha un sistema, financiado íntegramente con fondos públicos, para la gestión de la biomasa. Actualmente, son los propietarios los que deben asumir la limpieza de los montes o, si no pueden hacerlo directamente, pueden dejar que la Administración, a través de la empresa pública Seaga, lo haga, pero en este caso deben pagar 350 euros por hectárea.

Para la Asociación Forestal, se trata de una cuestión de seguridad pública, y debe ser la Administración la que se encargue de ello con el beneplácito de los propietarios, que permitirían actuar sobre sus terrenos. Para la financiación debería recurrirse, opina la asociación, a subvenciones europeas, puesto que los incendios son un problema de seguridad en el sur de Europa para el cual la Unión Europea está ofreciendo colaboración a los Estados que la integran.

Otro de los factores que los propietarios de terrenos forestales consideran necesario es modificar la Lei do Solo para que toda nueva construcción que se sitúe en las inmediaciones de áreas forestales cumpla la normativa relativa a prevención de incendios y guarde las distancias de separación.