Tom Cruise logra un récord Guinnes por una de sus escenas en «Misión Imposible: Sentencia final»
SOCIEDAD

El actor estadounidense, que no suele recurrir a dobles de acción, saltó 16 veces desde un helicóptero atado a un paracaídas empapado en combustible
09 jun 2025 . Actualizado a las 08:20 h.No es el primer récord Guinness para Tom Cruise —puede presumir de ser el actor con más películas consecutivas con una recaudación de 100 millones de dólares—. Y tampoco es la primera vez que se enfrenta a un desafío en el que se juega el físico. El actor de 62 años, que acostumbra a realizar las escenas más peligrosas de sus películas sin dobles de acción, acaba de ser reconocido con un récord Guinness mundial al mayor número de saltos en paracaídas en llamas realizados por una persona.
Cruise, nominado al Oscar en tres ocasiones, saltó 16 veces desde un helicóptero atado a un paracaídas que había sido empapado previamente con combustible, para prenderle fuego, cortar los restos carbonizados, desplegar el de repuesto y aterrizar fuera de peligro. Lo hizo durante el rodaje de Misión Imposible: Sentencia final, estrenada en mayo, la octava y última entrega de la saga de acción en la que da vida a Ethan Hunt. «Ningún otro actor o especialista se ha acercado a esa cantidad de gotas que desafían a la muerte», explica la organización que le ha otorgado el reconocimiento.
«No tengo miedo de encontrarme frente a lo desconocido, el cine es emoción y placer y cuando hay que hacer esfuerzos, prefiero enfrentarme personalmente a ellos», afirmó el actor durante la presentación de la cinta el el festival de Cannes. Porque como él mismo explicó, estas experiencias hacen que su vida sea interesante. «Algunas personas pueden tener miedo a lo desconocido, yo siento mas bien curiosidad, para mí ese es el motor».
Una larga secuencia en un submarino, que se recreó en un estudio y obligó a la construcción de una gigantesca maqueta, o una espectacular persecución aérea con la estrella de Hollywood haciendo acrobacias sobre un avión de hélices de de 1930 —el director Christopher McQuarrie explicó que para capturar las imágenes se efectuaron 4.000 vuelos— son otros ejemplos que demuestran el trabajo del actor en la película, planeada como el final de la franquicia de acción. «Sí, Tom Cruise arriesga su vida filmando estas secuencias», declaró McQuarrie.

Pero en estos casi treinta años en los que el intérprete se ha metido en la piel de Ethan Hunt, ha vivido varias misiones casi imposibles para el resto de los mortales. Así, para Misión: Imposible. Protocolo fantasma, en el año 2011, escaló el rascacielos más alto del mundo, el Burj Khalifa de Dubái. En la tercera entrega de la saga protagonizó una caída desde el rascacielos de Shanghái, sujeto a una grúa, desde casi 20 metros de altura, hasta que su cabeza acabó a escasos 50 centímetros del suelo. En el 2018, en Misión: Imposible: Fallout, Cruise se convirtió en el primer actor en completar ante la cámara un descenso HALO —acrónimo inglés de high altitude, low open—, una técnica militar de salto en la que se abre el paracaídas a baja altura, después de un tiempo de caída libreante la cámara.