Una nueva pastilla muestra potencial para eliminar los gusanos intestinales que causan infecciones

redacción REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Análisis de heces para comprobar la eliminación de los parásitos dentro del ensayo realizado en Kenia
Análisis de heces para comprobar la eliminación de los parásitos dentro del ensayo realizado en Kenia

El comprimido único ha mostrado en un ensayo clínico seguridad y eficacia para eliminar estos parásitos transmitidos por el suelo y el agua y que suponen un grave problema sanitario en los países en desarrollo

11 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Un nuevo comprimido, que combina albendazol e ivermectina, es seguro y más eficaz que un comprimido de solo albendazol en el tratamiento de parásitos intestinales como el Trichuris trichiura y otros helmintos que se transmiten por el suelo y que son la causa de las infecciones más comunes a nivel mundial y que afectan a las poblaciones más pobres y vulnerables. Así se recoge en un ensayo clínico realizado por el consorcio STOP liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), un centro impulsado por la Fundación ”la Caixa”.

 Los hallazgos, publicados en The Lancet Infectious Diseases, abren oportunidades para mejorar el control de estas infecciones tropicales desatendidas, que afectan a unos 1.500 millones de personas en todo el mundo.

 Las helmintiasis transmitidas por el suelo (STH) están causadas por cuatro especies de gusanos parásitosAscaris lumbricoides, Trichuris trichiura y los anquilostomas Ancylostoma duodenale y Necator americanus— que se transmiten a través del contacto con el suelo o el agua contaminados. Tienen un impacto significativo en la nutrición y la salud, especialmente en la población infantil y mujeres en edad reproductiva que viven en zonas endémicas de América Latina, Asia y África subsahariana.

 La estrategia actual para el control de los helmintos se basa en tratamientos regulares con albendazol para las poblaciones de riesgo, junto con mejoras en el agua, el saneamiento y la higiene. Este fármaco es muy eficaz contra Ascaris, pero su eficacia contra Trichuris trichiura ha ido disminuyendo, probablemente debido a la aparición de resistencias al medicamento. Además, el albendazol no es eficaz contra Strongyloides stercoralis, otro parásito intestinal que se ha añadido a la lista de los que requieren medidas de control.

 Por ello, el consorcio STOP, financiado por el programa de la Asociación de Ensayos Clínicos de Europa y Países en Desarrollo (Edctp), probó una pastilla innovadora que combina una dosis fija de albendazol e ivermectina.

Ventajas

«Esta coformulación en dosis fija presenta varias ventajas. Es fácil de administrar, ya que se trata de un único comprimido y no requiere ajustes de dosis en función del peso del niño», explica el líder del proyecto, José Muñoz, investigador en ISGlobal y jefe del Servicio de Salud Internacional del Hospital Clínic Barcelona. «Además, esperamos que la combinación de dos fármacos con mecanismos de acción diferentes reduzcan el riesgo de que los parásitos se vuelvan resistentes a los medicamentos», añade.

El ensayo clínico Alive, realizado en Etiopía, Kenia y Mozambique, probó la seguridad y la eficacia de la pastilla en niñas y niños escolares (de 5 a 18 años) infectados por T. trichiura, anquilostomas, S. stercoralis o una combinación. Los participantes se dividieron en tres grupos.

 La eficacia del tratamiento se evaluó en función de la tasa de curación (ausencia de huevos en las muestras de heces después del tratamiento) y la reducción del número de huevos en heces, comparado con antes del tratamiento. Para T. trichiura, la coformulación logró tasas de curación más altas en ambos regímenes (97% para FDCx3, 83% para FDCx1) comparado con el albendazol solo (36 %). Para los anquilostomas, el régimen FDCx3 mostró una mayor tasa de curación (95%), mientras que el régimen FDCx1 fue similar al albendazol (79 % y 65 % respectivamente). Para S. stercoralis, el tamaño de la muestra era demasiado pequeño para evaluar la eficacia, pero la evidencia sugiere que la pastilla única FDC también sería más eficaz, ya que la ivermectina es mucho más efectiva que el albendazol contra este parásito.

Aunque la mayoría de las infecciones se clasificaron como leves, ambos regímenes de la coformulación lograron mayores tasas de reducción de huevos que el albendazol solo.

 Implicaciones para la salud pública

«Se trata de un ensayo fundamental, que abre la posibilidad de controlar todas las especies de STH, incluido el Strongyloides, y puede hacer que se reconsideren los objetivos de eliminación que se consideraban inalcanzables solo con albendazol», afirma Alejandro Krolewiecki, coordinador del ensayo clínico. El siguiente paso es llevar a cabo ensayos de mayor envergadura, como el liderado por el proyecto STOP2030 , para evaluar la seguridad de la FDC en el contexto de campañas de desparasitación masiva.

También será esencial definir estrategias de implementación óptimas para que los programas nacionales adopten la FDC. Los resultados del ensayo sugieren que un régimen de dosis única puede ser sencillo de aplicar en actividades de desparasitación masiva, mientras que el régimen de tres días, que ofrece una eficacia superior, puede ser mejor para tratamiento individual, o para programas que pretendan eliminar por completo las lombrices intestinales de la población.

«Gracias a su fórmula adaptada a la población infantil - orodispersable y con sabor a mango - y a su gran aceptación, este comprimido tiene un gran potencial para mejorar la salud en las regiones afectadas por estas enfermedades», afirma Stella Kepha, investigadora del Instituto de Investigación Médica de Kenia (KEMRI).

La fase 2 del ensayo se centró en la seguridad. Se reclutó a un pequeño número de participantes, que fueron tratados secuencialmente según su peso, para vigilar cualquier efecto adverso, que no se observó. Esto permitió que el ensayo pasara a la fase 3, en la que se evaluó la eficacia en un número mucho mayor de participantes, y se continuó monitoreando la seguridad.

En total, se examinó a 4.353 niños en busca de infecciones por helmintos y 1.001 fueron asignados aleatoriamente al tratamiento.