El aplaudido alegato de Marina Rivers contra el despilfarro de los famosos: «Pierden el vínculo con la realidad de la gente normal»
SOCIEDAD
La «influencer» defendió el poder del ahorro y afeó el despilfarro imperante entre las personas con alto poder adquisitivo: «Me han enseñado siempre a ahorrar mucho para lo que pueda pasar en la vida, que nunca se sabe... Hoy estás aquí, y mañana estás aquí»
02 oct 2024 . Actualizado a las 15:49 h.La influencer Marina Rivers se ha convertido en una de las más gratas sorpresas de la nueva edición de MasterChef Celebrity. La creadora de contenido madrileña, la más joven con diferencia, también destaca por una serie de valores poco frecuentes entre los famosos que acuden al talent show culinario. Contrasta con el resto de sus compañeros por sus constantes alegatos a favor de la formación de los chavales y, ahora, también por su defensa del ahorro frente al despilfarro tan común entre las celebridades.
Muy aplaudido en redes ha sido su discurso en el último programa emitido, en el que ha llegado a acusar a sus compañeros de «perder el vínculo con la realidad de la gente normal». Tras la prueba de exteriores, celebrada en las islas Cíes, Marina y varios de sus compañeros esperaban para la prueba final que decidiría quién permanecería y quién no en el concurso. Y, como es habitual, se pusieron a charlar de temas sentimentales. Fue Pitingo el que hizo saltar a la joven, al decir que una de las pruebas que hacía para saber si una persona podía ser su pareja ideal era proponerle ir a Punta Cana a un hotel de 600 euros la noche. Según él, si se echa atrás por el precio, no es para él.
«Pitingo, es que a 600 euros la noche no voy contigo a Punta Cana en la vida», saltó como un resorte Marina Rivers. Pero el resto de sus compañeros no parecían entender el problema del precio de la habitación, criticando a la gente con mucho dinero que no gasta y reclamándole ser más generosa. «No, yo soy supergenerosa con los demás, pero conmigo misma no», se defendió la creadora de contenido, que se autodefinió como miembro de «la Cofradía del Puño Cerrado».
La estudiante de un doble grado en Derecho y Economía madrileña negó ser «rata», ante la insinuación del chef Pepe Rodríguez, e hizo entonces un alegato por el ahorro. Se justificó en su entorno y en su pasado familiar. «Mi abuelo, que tenía una tienda superpequeñita y vendía leche, fue capaz de darle la entrada a sus cinco hijos para la casa», puso ella como ejemplo de los beneficios del ahorro.
Es por eso por lo que ella también opta por esa filosofía de vida. Ya lo había explicado más veces. Que ella solo había gastado su dinero para comprarse un coche y un piso, que ha adquirido recientemente. Pero el aprendizaje que ha recibido de su familia es que, para lo demás, no hay que caer en despilfarros ni lujos innecesarios. «Me han enseñado siempre a ahorrar mucho para lo que pueda pasar en la vida, que nunca se sabe... Hoy estás aquí, y mañana estás aquí», dijo refiriéndose a la posibilidad de un descalabro económico a lo largo de cualquier carrera.
Sus compañeros de MasterChef Celebrity le lanzaban miradas entre la condescendencia, la sonrisa burlona y la estupefacción, especialmente el diseñador de moda Pelayo, que no salía en sí de su asombro ante las palabras de la joven influencer. Ninguno de ellos parecía compartir, a simple vista, su defensa del ahorro.
«A mí me parece una aberración gastarse 600 euros en una noche de hotel», valoró Marina Rivers, antes de referirse a sus compañeros: «A lo mejor ellos, que están más acostumbrados a tener más dinero, pierden un poco el vínculo con la realidad de la gente normal».
También el entorno es importante. Una de las razones que adujo Marina Rivers para su gestión económica es su grupo de amigos. «Yo no tengo amigos que se dediquen a la farándula», explicó, «toda mi gente es de mi barrio».