La actividad del volcán siciliano, que no para de aumentar desde la pasada semana, ha derivado en la emisión de una columna de cenizas que afecta al espacio aéreo
23 jul 2024 . Actualizado a las 18:47 h.Parecía que la actividad del Etna había aflojado, que después de varias semanas de intensas erupciones el volcán italiano, el más grande de Europa, empezaba a coger el sueño. Pero la inflamación del monte siciliano volvió a rugir esta pasada madrugada, escupiendo una potente emisión de lava y cenizas —la tercera ya del mes— que obligó a cerrar el aeropuerto mas importante de Sicilia, el de Catania.
Pasadas las cuatro de la madrugada, el cráter conocido como Vorágine del Etna —a unos 3.000 metros de altura sobre el nivel del mar— se convirtió en una espectacular fuente de ardiente magma, desprendiendo una columna de humo de ocho kilómetros de altura que llenó de polvo el espacio aéreo. La suspensión de la actividad afectó a todas las operaciones de llegada y de salida, una medida que, en plena temporada estival, obligó a cancelar y desviar un elevado número de vuelos.
No parece que la situación vaya a calmarse pronto, ya que el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) de Italia ha constatado en la zona un aumento de la frecuencia y la amplitud de los llamados eventos infrasónicos, aquellos que no alcanza el oído humano. Los temblores arrojaba valores «muy altos» y los rugidos son constantes. Sin embargo, a mitad de esta tarde el aeropuerto ha anuciado la progresiva reanudación de su actividad.
La boca del volcán amaneció coronada por una nube de ocho kilómetros de altura que durante todo el día se movió en dirección sur-sureste. A media mañana, el INGV emitió una alerta roja para la aviación civil y fue entonces cuando fuentes aeroportuarias informaron de que los despegues y los aterrizajes se retomarían cuando el fenómeno de las cenizas finalizase y se retirasen los restos de material que hubiesen quedado depositados en las infraestructuras aeroportuarias. Para algunos vuelos de llegada se asignaron aeropuertos alternativos.
Llueve ceniza
Sobre las calles de Catania y de otras poblaciones cercanas llovió este martes ceniza durante todo el día, cubriendo con una capa de polvo oscuro calles y ventanas, mesas y sillas de terrazas, y obligando a ciudadanos y turistas a protegerse con sombreros y paraguas. El Etna mantiene desde hace semanas una fuerte actividad volcánica y ya el pasado 16 de julio expulsó una gran colada de lava y una columna de cenizas de seis kilómetros de altura que también afectó a las localidades de la zona. Muy cerca lleva también varios días activo el volcán Estrómboli.