Rafael Toledo, parasitólogo: «Sanidad y las comunidades tratan de demostrar que están haciendo algo imponiendo la mascarilla»
SOCIEDAD
El experto en inmunología denuncia que se está abordando una epidemia estacional con criterios covid
10 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El catedrático de Parasitología de la Universidad de Valencia Rafael Toledo Navarro cree que los responsables políticos del Ministerio de Sanidad y de las comunidades «tratan de demostrar movimiento, que están haciendo algo», frente a la ola de infecciones respiratorias que afecta a toda España. Cree que «defiende una postura más formal que de fondo» y solo buscan «apuntarse el premio de la bajada», algo que ve inminente y no desde luego porque ahora se adopte la mascarilla. Entiende que «la vuelta al cole puede influir un poco» a la hora de ralentizar ese descenso de la ola epidémica, pero tiene que llegar más pronto que tarde. De hecho, incluso valora que pueda «bajar abruptamente» porque en los brotes invernales los niños suelen servir de indicador de cómo se comporta la oleada y los datos indican que las infecciones están en descenso entre los más jóvenes.
Toledo no está en contra del uso de la mascarilla. Aboga porque una persona resfriada con alguien vulnerable al lado se la ponga o que esa misma persona que tiene alguna características de riesgo recurra a la mascarilla cuando sabe se va a reunir con mucha gente. Lo que critica el especialista, que como médico está más que habituado a este elemento de protección, es «el error de colectivizar las medidas individuales» porque esto «no ha permitido que se normalizara el uso individual». Como resultado, «la mascarilla ha dejado de ser un método profiláctico para convertirse prácticamente en un símbolo». En lugar de «ser respetuoso con el que decide llevarla», se ha «llegado al punto de que se critica al que la lleva» y se ha instalado un clima de polarización en la que unos poco menos que le atribuyen «poderes mágicos» a las mascarillas, mientras que otros «las demonizan».
Para el catedrático, esta forma de actuar de los gestores públicos, y en último término también de la ciudadanía, «lo único que demuestra es tan poca imagina como flexibilidad intelectual y conocimientos científicos».