Dos bodegas de la D.O. ourensana iniciaron la cosecha de blanco godello
22 ago 2023 . Actualizado a las 19:16 h.Desde las seis de la mañana del domingo está en marcha la vendimia 2023 en la denominación de origen más madrugadora: la de Valdeorras. A esa temprana hora, utilizando linternas frontales, comenzaron la recogida de los primeros racimos de blanco godello en la viñas que Adega O Cabalín tiene en Carballeda de Valdeorras. La cosecha de noche tiene la ventaja de que la uva entra «más fresquita» en la bodega, explica María Teresa López Fidalgo. Esta bodega tiene 48 parcelas y las cepas de godello, todas viejas, están diseminadas entre las otras, por lo que esta vendimia exige caminar mucho, tanto por la ladera de la cara norte como de la sur, detalla la propietaria.
La impresión tras esta primera jornada de vendimia es positiva: «La uva está bien de calidad y es abundante», afirma Teresa López. Las analíticas indicaban que el producto ya estaba a punto para ser cosechado. Javier García, de Bodegas Sampayolo, inició la recogida del godello en las fincas Castrillón, en A Rúa de Valdeorras, y Olivedo, en Petín. «Las uvas mandan», afirma García, y ya tienen la acidez y la graduación requeridas.
Los dos bodegueros que han iniciado la vendimia coinciden en sus apreciaciones sobre la calidad. Los técnicos del Consello Regulador corroboran «a excepcional calidade» que presentaban las uvas recogidas, con un «grado de maduración perfecto para comezar a elaborar os primeiros godellos deste ano». En el resto de variedades que se cultivan en Valdeorras observan también «un óptimo estado de conservación». En Sampayolo esperan que la producción sea mayor que la del año pasado. Javier García cuenta alcanzar este año entre 32.000 y 35.000 botellas, sumando el godello, la mencía y la garnacha que cosecha en 30 parcelas. También en O Cabalín. Llegan a los 3.000 kilos de godello, aunque tienen concedidos 5.000. El año pasado, explica Teresa López, les afectó el gran incendio de julio del 2022. «Algunas cepas se recuperaron, pero otras no», añade. Además, la sequía del año pasado afectó a toda la producción, por ello esperan tener más uva godello. En O Cabalín confiaban poder terminar la vendimia del godello durante la jornada dominical.
Tras el arranque de estas dos primeras bodegas, en el Consello Regulador da Denominación de Orixe Valdeorras esperaban que esta semana se sumen siete más. El miércoles 23, según las previsiones del fin de semana, serán al menos nueve las bodegas de esta denominación que estén vendimiando, algo histórico en cuanto al arranque temprano de la cosecha. La vendimia, apuntan, se ha adelantado una semana respecto a la media de los últimos años. Los primeros días se dedican casi en exclusiva a la recogida de godello, una variedad que está de moda y tiene mucha salida en el mercado, y quizás a alguna uva temprana de tinto. La vendimia del godello no se puede demorar porque se elevaría en exceso la graduación habitual para un vino blanco, explica un portavoz de la Denominación de Origen.
Las altas temperaturas de las últimas semanas han acelerado los procesos de maduración y la godello es una uva delicada por lo que, una vez que los parámetros de acidez y graduación se cumplen, se inicia su cosecha. Hasta mayo y junio llovió abundantemente, lo que permitió que las cepas se nutrieran y estén fuertes. Los viticultores tuvieron que estar muy pendientes, eso sí, de tener sus viñas limpias y bien cuidadas, porque la lluvia multiplicaba el riesgo de plagas y enfermedades para las vides. El calor de las últimas semanas, sin llegar a los excesos de temperaturas del año pasado, también ha sido bueno para marcar el arranque.
En todo caso, la vendimia no ha hecho más que comenzar. Como explica Javier García, que tiene 30 parcelas, «la vendimia dura un mes y hay que empezar poco a poco». La campaña será larga, hasta principios de octubre.