Nuevo impulso para que Asanog ampare a los niños con cáncer y sus familias
SOCIEDAD
El proyecto Grandes Sorrisos incide en la dinamización social, educativa y lúdica
09 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La Asociación de Ayuda a Niños Oncológicos de Galicia (Asanog) le está dando una vuelta de tuerca más en el apoyo que prestan a los menores con cáncer y sus familias. Gracias a un proyecto financiando con algo más de 19.000 euros de la Fundación ‘‘la Caixa'' pretenden beneficiar a un total de 696 personas entre niños y familiares. De hecho, en el primer semestre de aplicación del programa ya han ayudado a 449 personas, además de tener que lamentar una veintena de diagnósticos de cáncer infantil nuevos.
Dentro de esta iniciativa, que han bautizado como Grandes Sorrisos, lo que pretenden, según explica Yenny Rodríguez, coordinadora de la entidad, es reforzar su apoyo en el ámbito educativo, de ocio y tiempo libre y a través del trabajo social, por supuesto en los hospitales, pero también a nivel individual y familiar, grupal y comunitario.
De hecho, como explica Rodríguez, este último campo, el de «darlle visibilidade [a la enfermedad] e sensibilizar a través das charlas nos colexios» resulta especialmente importante porque los compañeros son vitales «á hora de axudar na reincorporación». Más porque los tratamientos oncológicos en los niños acostumbran a tener tratamientos mucho más prolongados que en los adultos y duelos muy largos cuando hay desenlaces fatales. De ahí que Asanog, a través de sus psicólogas, educadoras, trabajadoras sociales y demás profesionales, esté presente en todos los aspecto del proceso, incluso algunos en los que no se pensaría en un primer momento, «como é o caso dos irmáns dos nenos enfermos que poden chegar a sentirse esquecidos», según detalla Rodríguez.
Están en lo económico, respaldando a las familias, por ejemplo con un piso en A Coruña en el que pueden quedarse si lo necesitan durante el tratamiento. También en lo educativo dentro y fuera de los hospitales, con su propia profesora y gestionando el apoyo de la Consellería de Educación. Y por supuesto en lo social, por ejemplo fomentando las actividades de ocio en las que participan los propios niños pero también sus familias. Un esfuerzo del que se acaban viendo sus frutos más allá de la propia convalecencia de los pequeños. De hecho, Asanog no pide a nadie que se asocie, basta con tener un diagnóstico de cáncer en un menor de 14 años y la entidad ofrece toda su ayuda, que continúa aunque los niños en tratamiento superan esa edad. Sin embargo, los padres que ya han superado ese duro trance acaban implicándose con el colectivo con tiempo, dinero, conocimiento... multiplicando así las capacidades de la red de apoyo.