Las leyes que ya no se aprobarán: de la ley de familias al olvido oncológico

María Viñas Sanmartín
maría viñas REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

María Pedreda

El adelanto electoral paraliza la tramitación de las iniciativas pendientes

31 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La decisión de adelantar las elecciones generales al 23 de julio obliga a paralizar desde ya toda actividad parlamentaria y, con ella, la tramitación de las iniciativas que estaban en marcha. Más de 60 leyes quedarán en el aire, muchas de ellas de la agenda social. Podrían ser recuperadas en la próxima legislatura, pero su desarrollo tendría que empezar de cero si así lo decide la mayoría que salga de las urnas.

LEY DE FAMILIAS

Adiós a los días para cuidar a familiares. El proyecto ya estaba encarrilado. Se aprobó en marzo en el Consejo de Ministros y se encontraba en plazo de enmiendas. Incorporaba nuevos permisos para cuidar a familiares enfermos —hasta nueve días remunerados al año— y para atender a los hijos —ocho semanas a disfrutar de manera continua o no hasta que los menores cumpliesen ocho años—, además de ampliar a las mujeres desempleadas la ayuda de crianza de cien euros al mes hasta los tres años del niño . Extendía también los beneficios de las familias numerosas a nuevos tipos de familia, como las monoparentales con dos hijos, y equiparaba los derechos de los parejas de hecho con los de los matrimonios.

PROSTITUCIÓN

Seguirá en un limbo alegal. El PSOE decidió encarar el problema de la prostitución en España —donde no está regulada ni tampoco prohibida— desde la postura abolicionista. Intentó hacerlo a través de una enmienda a la ley del «solo sí es sí», pero se vio obligado a retirarla para que esta saliese adelante. Presentó entonces una proposición de ley que, entre cosas, contemplaba multas e incluso penas de cárcel no solo para los proxenetas, también para los dueños de los locales en los que se ejerciese la prostitución y para los clientes. La iniciativa llevaba seis meses atascada en el Congreso.

EQUIDAD SANITARIA

El blindaje de la sanidad pública. La Cámara Baja llevaba desde el verano pasado tramitando el proyecto de ley de equidad, universalidad y cohesión del Sistema Nacional de Salud, más conocido como ley Darias. Su objetivo era, principalmente, acabar con los copagos y limitar las derivaciones a la privada. De hecho, el texto recogía que estas solo estarían permitidas en casos excepcionales. La norma recuperaba la carta común de servicios única en todo el territorio nacional y ampliaba el derecho a la atención a las personas de origen español que viven en el extranjero (y a sus familiares). También quedará ahora en el aire la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública (AESAP).

OLVIDO ONCOLÓGICO

A cuestas con el historial. Pedro Sánchez anunció hace un par de semanas el fin de la discriminación por razones médicas a la hora de solicitar hipotecas, contratar seguros o pedir préstamos. Su idea para garantizar el derecho al olvido oncológico era enmendar antes de que terminase junio una ley que regula la atención a los clientes, declarando nulas las cláusulas que excluyesen o impusiesen peores condiciones a los que hubiesen pasado un cáncer. Con el Pleno del Congreso suspendido, haber tenido un tumor seguirá siendo un obstáculo para seguir adelante.

ley de la ELA

Las ayudas a los afectados, cada vez más lejos. La ley de la ELA, presentada a iniciativa de Ciudadanos, llevaba más de un año paralizada en el Congreso. Hasta en 48 ocasiones fue bloqueada por el Gobierno, que apelaba al sosiego para elaborar una norma sobre una enfermedad «delicada». El texto plantea, entre otras cosas, reconocer el 33 % de discapacidad a los pacientes desde el momento del diagnóstico, introducir la posibilidad de acogerse al bono social eléctrico cuando se necesite ventilación mecánica y un servicio domiciliario de cuidados fisioterapéuticos y especializados 24 horas.

LEY DE SALUD MENTAL

Ratios mínimas y tiempos de espera. A finales del 2021, Unidas Podemos presentó una iniciativa para regular el acceso a una atención sanitaria y social de calidad en el ámbito de la salud mental. Su propuesta, además de reducir los tiempos de espera, pasaba por implantar una ratio mínima de 18 psiquiatras, 18 psicólogos clínicos y 23 enfermeros especializados por cada 100.000 habitantes en un plazo máximo de cuatro años. La ley lleva más de un año y medio atascada en el Congreso, ahora en la fase de enmiendas.

desperdicio alimentario

En la recta final. A la ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario solo le quedaba el último empujón. Pendiente de informe en el Senado, preveía multar a los supermercados que tirasen comida y obligar a los restaurantes a informar a los clientes de la posibilidad de llevarse las sobras. Con ella, España se hubiese convertido en el tercer país de la Unión Europea en intentar legislar para evitar que más de 1.300 millones de kilos de alimentos acaben cada año en la basura, no solo en los hogares, también en los distintos eslabones de la cadena de producción. Estos tendrían que elaborar planes específicos de prevención para evitar el desperdicio. El texto contemplaba sanciones de entre 2.000 y 60.000 euros, y de hasta 500.000 euros para los actores reincidentes.

LEY DEL CINE

Las series tendrán que esperar. Era otra de las iniciativas más avanzada, a falta de pasar por el Senado. Una de sus claves era la incorporación de las series, lo que les abría la puerta a recibir ayudas para su producción. Esto exigía a las plataformas de contenidos televisivos transparencia en sus datos de visionado, lo que ahora no ocurre.