La NASA consigue guiar una nave en la Luna con un GPS

La Voz MADRID / EUROPA PRESS

SOCIEDAD

La ingeniera de sistemas Rebecca Rogers, a la izquierda, mide la nave espacial Capstone
La ingeniera de sistemas Rebecca Rogers, a la izquierda, mide la nave espacial Capstone Dominic Hart

Este avance permitirá que los vehículos espaciales puedan posicionarse sin depender de las órdenes que reciben desde Tierra

20 may 2023 . Actualizado a las 17:39 h.

El cubeSat CAPSTONE de la NASA probó con éxito una tecnología de navegación similar al GPS de la Tierra por primera vez, cuyo fin es ayudar a misiones espaciales más eficientes en la Luna.

El Sistema de Posicionamiento Autónomo Cislunar de la misión es un sistema de comunicaciones y navegación de nave espacial a nave espacial que trabaja con el Orbitador de Reconocimiento Lunar de la NASA para determinar la distancia entre las dos naves espaciales en órbita lunar.

Esta tecnología podría permitir que futuras naves espaciales determinen su posición en el espacio sin depender exclusivamente del seguimiento desde la Tierra. CAPSTONE también cuenta con una nueva capacidad de alcance unidireccional de precisión integrada en su radio que podría reducir la cantidad de tiempo de red terrestre necesario para las operaciones en el espacio.

La nave espacial también capturó sus primeras imágenes de la Luna, mostrando la superficie lunar cerca del Polo Norte de la Luna cuando CAPSTONE se acercó a la Luna el 3 de mayo, informa la NASA.

Lanzado en junio de 2022, CAPSTONE (Cislunar Autonomous Positioning System Technology Operations and Navigation Experiment) se convirtió en noviembre pasado en la primera nave espacial en entrar en una órbita alargada única que apoyará las misiones Artemis de la NASA.

En esta órbita especial, conocida formalmente como una órbita de halo casi rectilínea (NRHO), la atracción de la gravedad de la Tierra y la Luna interactúan para permitir una órbita semiestable. Allí, la física hace la mayor parte del trabajo de mantener las naves espaciales en órbita en la Luna, reduciendo la necesidad de que las naves espaciales usen combustible para mantener el NRHO en comparación con otras órbitas similares.

Este satélite del tamaño de un horno de microondas, que pesa solo 25 kilos, es el primer CubeSat en volar y operar en la Luna. El CubeSat sirve como pionero para Gateway, La futura estación espacial en órbita lunar que forma parte del programa Artemis de la NASA.