Aumenta el cáncer de colon entre los menores de 50 años

j. a. guerrero COLPISA

SOCIEDAD

MARCOS CREO

Uno de cada cuatro nuevos casos de tumor colorrectal en jóvenes se diagnostica en estadios avanzados; los expertos animan a vigilar síntomas como el dolor abdominal, la pérdida de peso o el sangrado

28 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Una mañana te duele el estómago, una noche observas sangre en las heces, otro día te sientes más cansado de lo habitual. Piensas que es un problema digestivo sin más. Pero pasa el tiempo y las molestias abdominales siguen ahí, el sangrado se vuelve más frecuente y la fatiga persiste. Cuando decides acudir al médico han pasado semanas. Es tarde. Te diagnostican un tumor en el colon. O en el recto. Un mazazo.

Esta situación empieza a ser habitual en las consultas de los oncólogos, y lo más preocupante, los diagnósticos en pacientes menores de 50 años aumentan a un ritmo «alarmante». Hay otros síntomas (deposiciones muy duras o muy líquidas y cambios en el color, anemia, pérdida de peso muy repentina...), pero ahora han sido los propios especialistas del Grupo de Tratamiento de los Tumores Digestivos (TTD) los que acaban de advertir del crecimiento en la incidencia del cáncer colorrectal (el que afecta al colon o al recto) en este segmento de edad.

El tumor colorrectal es el más frecuente diagnosticado en España (43.370 nuevos casos en 2022), pero ha experimentado un mayor avance entre las personas de 20 a 49 años. En uno de cada cuatro nuevos casos se diagnostica en estadios avanzados, y en casi la mitad acabará haciendo metástasis, todo un desafío para los especialistas.

«Es verdad que vemos cáncer de colon en paciente más jóvenes», dice Enrique Aranda, presidente del TTD y jefe de Servicio de Oncología Médica en el Hospital Reina Sofía de Córdoba. Aún no hemos llegado a un incremento tan llamativo como en Estados Unidos, donde en 25 años se ha doblado la tasa en adultos menores de 50 años, «aunque la alerta existe, porque vendrá», pronostica el experto.

Aranda recuerda que el cáncer colorrectal es un tumor muy silente «porque dependiendo de dónde sea, si es más alto o está más pegado al recto, la sintomatología varía y hace que sea difícil de diagnosticar, incluso de pensar. Porque lo más frecuente -apunta- es que haya cualquier problema digestivo y no un cáncer. Es un tumor muy traicionero y en base a esa sintomatología tan larvada, se diagnostica en fase avanzada».

El consumo de alcohol es el primer factor de riesgo en este tipo de tumores, pero hay otros. «Ahora vivimos más y esa mayor expectativa de vida hace que tengamos más posibilidades de tener cáncer en general y cáncer de colon en particular», explica Aranda, que añade el sobrepeso, la vida sedentaria, el tabaquismo, el consumo de carnes procesadas y la baja ingesta de verduras.

Los médicos coinciden en que mantener un peso normal desde edades tempranas, elevar el consumo de fibra y realizar alguna actividad física protegen frente a este tipo de tumores. Y señalan, por ejemplo, que después de un diagnóstico de cáncer colorrectal caminar media hora al día a un ritmo rápido reduce en casi un 40 % el riesgo de mortalidad.

Afortunadamente, la mayoría de los casos son prevenibles con un estilo de vida saludable. «Lo primero que recomendamos es la prevención primaria», indica el presidente del TTD, «es decir, hacer ejercicio físico, no fumar, tener una moderación muy importante con el alcohol, y volver a la dieta mediterránea. Y digo volver porque los más jóvenes, quizás inducidos por la cultura más dominante, tienen una manera de comer de dieta rápida, de mucho producto cárnico».

La importancia de la detección precoz

Los programas de cribado colorrectal con un test de sangre oculta en heces resultan fundamentales para una detección temprana que permita abordar la enfermedad con mayor garantía de éxito. Según Elena Élez, oncóloga médico del Hospital Universitario Vall d'Hebrón, de Barcelona, el cáncer colorrectal en personas jóvenes suele diagnosticarse en etapas avanzadas debido a una baja sospecha clínica. «En torno al 25 % de los pacientes debutarán con la enfermedad diseminada y prácticamente el 50 % acabarán desarrollando enfermedad metastásica», refiere la especialista para subrayar la importancia de la detección temprana y la concienciación sobre el cáncer colorrectal precoz en personas jóvenes.

«Ahora los cribados están entre los 50 y los 69 años. Por eso animaría a responder afirmativamente si nos piden participar en una campaña. Es muy fácil y solo en España se pueden salvar unas 3.600 vidas», reitera Enrique Aranda. A su juicio, estos programas son del todo esenciales por dos razones: «Si ha salido sangre en heces y me hago una colonoscopia y tengo un cáncer de colon, me lo van a diagnosticar precozmente. Y, además, si tengo un pólipo o un adenoma (un tumor benigno) me lo van a quitar y no va a aparecer el cáncer». Con todo, el oncólogo del Reina Sofía recomienda a todas las personas, incluso a los menores de 50 años, que consulten a su médico ante cualquier sospecha.

Pilar García Alfonso, jefa de sección de Oncología Médica de la Unidad de tumores digestivos del Gregorio Marañón, en Madrid, resalta, además, la importancia de concienciar a los propios médicos. «El problema es que el nivel de sospecha es bajo por parte de la población, pero también de la comunidad médica», precisa. «Así, cuando una persona de 29 años viene a consulta diciéndote que tiene molestias digestivas, no se te ocurre pensar que tiene un cáncer, pero con esto nos damos cuenta de que no se puede infravalorar», reflexiona la doctora sobre la necesidad de un mayor nivel de sospecha clínica en la detección temprana.

Y en esta línea abunda el presidente del TTD: «Es importante que el médico tenga ese ojo clínico para diferenciar una patología digestiva de un cáncer. Hay señales de alarma que podemos detectar, como la anemia, el sangrado o la pérdida de peso, y hacer que el paciente se diagnostique precozmente. Pero es importante no caer en la cancerofobia. No todos tenemos cáncer», apostilla Aranda.

Los «sospechosos habituales»

Tabaco, alcohol, carnes procesadas, obesidad... los «sospechosos habituales» en un cáncer colorrectal. El viernes 31 de marzo se celebra el Día Mundial contra el Cáncer Colorrectal, lo que ha animado al TTD, el Grupo de Tratamiento de los Tumores Digestivos, a lanzar la campaña #SospechososHabituales para recordar que el tabaco, el alcohol, las carnes procesadas y la obesidad son algunos de los factores de riesgo más importantes y evitables relacionados con este cáncer.

A través de esta nueva campaña, los oncólogos alertan del aumento de casos de tumor colorrectal en la población joven, entre 20 y 49 años, «una entidad emergente, con características epidemiológicas, clínicas y moleculares específicas, lo que representa un reto», señalan los especialistas. Según el informe Las cifras del cáncer en España', el 25% de los tumores están relacionados con el aparato digestivo. «De ahí la importancia de concienciar a la población sobre la prevención y la detección temprana del cáncer colorrectal para mejorar el pronóstico, la supervivencia y la calidad de vida de los pacientes», dicen desde el TTD.