Hallazgo arqueológico: «O Porriño reescribe la Prehistoria de Galicia»

Monica Torres
mónica torres O PORRIÑO / LA VOZ

SOCIEDAD

cedida

Dos investigadores dan un nuevo giro a la historia del Paleolítico gallego al confirmar que los primeros pobladores de la comunidad residieron allí hace 310.000 años

25 mar 2023 . Actualizado a las 01:52 h.

Los primeros humanos que llegaron a lo que hoy se conoce como Galicia se asentaron en O Porriño. Concretamente en la parroquia de Budiño. La investigación desarrollada por el profesor de la Universidade de Vigo, Eduardo Méndez Quintas y Manuel Santoja, del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), identifican el de Budiño como el yacimiento con presencia humana más antiguo de Galicia. Este asentamiento se descubrió en 1961 y hace 60 años fue inicialmente excavado por Emiliano Aguirre, mundialmente conocido por ser el impulsor del proyecto Atapuerca y que falleció recientemente. «Sabíamos que era viejo, pero no la antigüedad. Solo ahora tras el análisis en Australia de los sedimentos hemos podido confirmar la datación», indica Méndez Quintas que ha presentado los resultados con el alcalde de O Porriño, Alejandro Lorenzo.

Hasta ahora el más antiguo de Galicia, ubicado a escasos kilómetros del de Budiño era el de Porto Mayor, en As Neves, con unos 300.000 años a sus espaldas. «En este caso superamos esa datación y la situamos en unos 310.000 años, por lo que Porto Mayor pasa a ser el segundo en antigüedad», apunta el experto. Los investigadores han podido datar el yacimiento mediante un procedimiento de luminiscencia ópticamente estimulada de los sedimentos recogidos y analizado en las instalaciones de la Universidad de Adelaida, en Australia. Es un proceso en el que se analizan los granos de feldespato, que son como baterías que almacenar radiación y, en función de la cantidad que tengan, se determina la antigüedad, explicaron los expertos.

«Es la segunda vez que se consigue datar, pero en los años 60 se decía que tenía 20.000 años. Suponía un gran problema porque era un sitio con unas herramientas muy antiguas, pero con una cronología muy moderna, ya del Paleolítico Superior y similar en edad a la cueva de Altamira, por ejemplo», explica el arqueólogo Eduardo Méndez Quintas. Esto llevó a la idea de que en el noroeste de la Península existía un Paleolítico atípico y anacrónico con respecto a lo que sucedía en el resto del suroeste de Europa, apunta.

«Con esto superamos una anomalía histórica, que nunca existió, y que ha ayudado a crear una idea negativa de las fases más antiguas de la Prehistoria gallega», considera el investigador.

Respecto a la trascendencia de este hito arqueológico, Méndez Quintas destaca que se abre un nuevo enfoque para entender el poblamiento en la zona y en el contexto mundial. «En el ámbito del noroeste vamos echando cada vez más para atrás la primera presencia humana. Vamos viendo que tenemos un poblamiento antiguo equiparable al del resto de la Península», señala.

A una escala mayor, a nivel Europa, añade, «con la cronología que tiene y el aspecto de sus herramientas líticas, es otro yacimiento más que viene a apoyar un poblamiento peculiar del sur de Europa con respecto al Norte en esa época». «Los datos de Budiño nos permiten descubrir y entender cómo ha sido el proceso del poblamiento humano en el continente europeo durante el último medio millón de años porque apoyan una teoría que manejábamos de que el poblamiento de la Península se desarrolla hace menos de 400.000 años con poblaciones de origen africano», concluye. En Europa, en esa misma cronología, indica, «el poblamiento es de población local, generada en Europa».

El equipo de Méndez Quintas y Manuel Santoja destaca que la cronología del yacimiento y las características de los útiles líticos aumentan la importancia del yacimiento de Gándaras de Budiño en el contexto del desarrollo cultural y humano de finales del Pleistoceno medio europeo. «Sitios como este justifican la convivencia en este momento de diferentes tecnologías (Achelense y Paleolítico Medio), producidas a su vez por humanos diferentes y con distintos orígenes geográficos (una especie africana indeterminada y los neandertales)», indican.

Otro de los aspectos relevantes se refiere a los materiales encontrados en la excavación en área de 30 metros cuadrados que hicieron el pasado verano y que complementa la campaña de sondeos del 2018. En esa pequeña superficie intervenida recuperaron más de mil artefactos líticos, entre los que destacan abundantes ejemplos de bifaces y otras piezas características de las industrias de tipo achelense.

«Los resultados de este estudio son de vital importancia a nivel nacional e internacional, ya que no solo cambian el conocimiento que tenemos sobre la historia de O Porriño, también reescriben la Prehistoria de Galicia», apuntó el alcalde, Alejandro Lorenzo. En vista de los resultados, los trabajos se retomarán este año.