Cinco destinos para disfrutar de la nieve en Galicia

SOCIEDAD

óscar cela

Caminar por cumbres blancas, visitar aldeas con encanto o esquiar en las pistas de Manzaneda son algunos de los planes ideales para una escapada invernal

24 feb 2023 . Actualizado a las 16:33 h.

Nieva en Galicia. La llegada de una borrasca y el regreso del frío polar han dejado buena parte de la comunidad cubierta por un manto blanco. Una gran noticia para quienes pensaban que los planes se acababan con el fin del carnaval. Es el momento ideal para tomar un respiro y disfrutar de la naturaleza antes de volver a la rutina. ¿Te apetece hacer una escapada invernal este fin de semana? Aunque habrá que prestar atención a la cota de nieve, que este jueves se situaba en alturas inferiores a los 600 metros, existen destinos que, a modo de comodín, suelen mantener sus cumbres heladas. Es el caso de las montañas de Lugo y Ourense.

Ya sea para caminar por sierras como la de Os Ancares, visitar aldeas con encanto como O Cebreiro o intentar hacer esquí en estaciones como Cabeza de Manzaneda son algunos de los planes que se pueden hacer estos días en los cinco destinos que te proponemos para disfrutar de la nieve. ¿Te apuntas a una escapada?

Os Ancares

Un perro juega en la nieve en Cervantes, una población de Os Ancares, en una imagen de archivo
Un perro juega en la nieve en Cervantes, una población de Os Ancares, en una imagen de archivo Carlos Castro

Un horizonte de cumbres nevadas. Es la imagen que define en esta época del año la sierra de Os Ancares, un conjunto de montañas que actúan como frontera natural entre Galicia y León. Si el paisaje es impresionante en cualquier estación, la llegada de las primeras nieves acentúa su belleza y el encanto de las pequeñas aldeas que salpican sus valles. Es el destino ideal para disfrutar de la naturaleza entre rutas de senderismo y temperaturas bajo cero.

Las montañas de Os Ancares rozan los dos mil metros de altura, por lo que suelen contar con un manto blanco permanente en sus cimas. Además, se trata de un espacio protegido por su biodiversidad. Sus bosques, formados por especies autóctonas como carballos, castaños y acebos, sirvieron de hogar para los últimos ejemplares de oso pardo que poblaron Galicia. Y es que, pese a tratarse de una zona habitada desde la época prerromana, tal como demuestran las pallozas de la aldea de O Piornedo, se mantuvo casi aislada durante mucho tiempo. Algo que favoreció el mantenimiento de un patrimonio natural y cultural que se tiñe de blanco estos días.

O Cebreiro

Un grupo de jóvenes se fotografían junto a una palloza nevada en O Cebreiro, en una imagen de este febrero
Un grupo de jóvenes se fotografían junto a una palloza nevada en O Cebreiro, en una imagen de este febrero OSCAR CELA

¿Alguna vez has visto imágenes de peregrinos rodeados de nieve y pallozas? Se trata de O Cebreiro, una aldea situada a 1.300 metros sobre la montaña lucense, entre las sierras de Os Ancares y O Courel. Es la puerta de entrada del Camino Francés en Galicia y uno de esos lugares con encanto que se vuelven mágicos con las primeras nevadas de la temporada.

Los techos de las pallozas, unas construcciones celtas de forma circular, se cubren de nieve para formar una de las postales más buscadas del invierno gallego. Ir a sacar la foto de rigor o a disfrutar del encanto del pueblo es la excusa perfecta para entrar al calor de sus restaurantes y disfrutar de la gastronomía. Y es que O Cebreiro, como buena parte de las localidades por las que pasa el Camino de Santiago, cuenta con una oferta de hostelería adaptada a todos los gustos y peregrinos.

Cabeza de Manzaneda

Estación de Montaña de Manzada durante la primera jornada de la temporada, el pasado 27 de enero
Estación de Montaña de Manzada durante la primera jornada de la temporada, el pasado 27 de enero MIGUEL VILLAR

 El inicio de la temporada de nieve suele ser sinónimo del inicio de la temporada de esquí y snowboard. Los deportes de invierno son la alternativa de ocio perfecta para quienes buscan un plan de turismo activo pese a las bajas temperaturas. Galicia cuenta con una única estación, ubicada en Cabeza de Manzaneda. La cota de nieve se sitúa entre los 1.500 metros de su base y los 1.800 metros de su cima.

La estación ofrece alquiler de equipos de esquí, snowboard, trineo y raquetas. Además, cuentan con cursos de inciación o perfeccionamiento para que nadie se quede sin disfrutar de la veintena de pistas con las que cuenta. Todo ello rodeado por un paisaje de alta montaña que se puede disfrutar desde el telesilla turístico. Y es que, además de actividades invernales, Cabeza de Manzaneda cuenta con una oferta de actividades de aventura que incluye un parque, una tirolina o paseos en caballo.

Debido a las altas temperaturas registradas en Galicia a lo largo de febrero, la Estación de Montaña de Manzaneda se vio obligada a cerrar sus pistas el pasado martes. Sin embargo, desde la gerencia confían en que las nevadas de estos días permitan su reapertura. «Si ocurre, estaremos preparados para poner a punto la estación», anunciaban a través de las redes sociales.

O Courel

Nieve en O Courel, en una imagen de archivo
Nieve en O Courel, en una imagen de archivo CARLOS RUEDA

Como sucede con Os Ancares, las montañas de O Courel son otro de esos lugares que se transforma en postal navideña con la llegada del invierno. La sierra, situada al sur de la provincia de Lugo, cuenta con cumbres más bajas que su vecina del norte, pero igual de espectaculares cuando la nieve las cubre. También se trata de un destino protegido por su valor ecológico y su biodiversidad.

Además del patrimonio natural, O Courel cuenta con un patrimonio etnográfico e histórico que gana encanto con la caída de los primeros copos de nieve. Casas de piedra, balcones de madera y tejados de pizarra se amontonan en pequeñas aldeas. Muchas han sido restauradas y catalogadas como Bien de Interés Turístico.

Pena Trevinca

Pena Trevinca.
Pena Trevinca. Santi M. Amil

Si hay un lugar donde las cumbres nevadas son a una estampa casi perenne es Pena Trevinca. El techo de Galicia, con 2.127 metros de altura, se mantiene cubierto por un manto blanco hasta bien entrada la primavera. Ubicado en el único macizo gallego que supera los dos mil metros de altitud, en la provincia de Ourense, es un lugar ideal para hacer montañismo o para los senderistas más atrevidos.