Los estudios fenológicos de Aemet muestran un pequeño adelanto estacional
18 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.¿Se adelanta la primavera cada año?; Con la crisis climática las señales de la naturaleza ante el preludio de una nueva estación se ven a menudo alteradas; por ejemplo, una floración temprana en invierno que anuncia una primavera incipiente, pero, de momento, este año no parece que sea así.
«No se sabe aún con certeza si a día de hoy estamos ante una primavera adelantada», ha explicado a EFE, Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), quien, sin embargo, destaca un dato muy puntual: En Madrid, la floración del almendro, uno de los primero frutales en florecer, se ha producido ya, alrededor de 5-6 días antes de lo habitual.
La fecha de la eclosión en Madrid del Prunus dulcis, un árbol de la familia de las rosáceas y uno de los primeros en anunciar la primavera, muestra una tendencia ligera de adelantamiento en las últimas cuatro décadas, según datos de la Aemet que señalan que en febrero de 2022 los almendros estaban en plena floración en la tercera decena del mes en los alrededores de la capital.
Como dato curioso, cabe destacar que en 2021 -año en el que la borrasca Filomena dejó una histórica y copiosa nevada, además de una intensa ola de frío de más de 5 días- la floración de los almendros en Madrid se adelantó entre 9 y 11 días, ha precisado Del Campo, quien ha incidido en que este año, de momento, no hay un «gran adelanto estacional».
La fenología es la ciencia que estudia los eventos biológicos en el mundo animal y vegetal como el desarrollo de las hojas y la floración de las plantas en primavera, la maduración de los frutos y la caída de las hojas en otoño y el comportamiento de la cría y migración de animales entre otros aspectos.
En las últimas décadas, cuando se altera algún factor climático como consecuencia del calentamiento global, por ejemplo, los parámetros de temperaturas, las especies de fauna y flora pueden registrar alteraciones en sus calendarios naturales.
Así, este año en Extremadura, los cerezos del Valle del Jerte (Cáceres) llevan acumulados unas 600 horas de frío, cantidades que se encuentran por debajo de la media de otras campañas y que, de momento, resultan deficitarias para conseguir una floración óptima y regular.
En fenología, la floración y la polinización son determinantes, pero no son parámetros únicos, porque también interesa como afectan las horas de frío, que en el caso de los cerezos equivale a una media de entre 800 y 900 horas de frío -entre 0 y 7 grados- para una correcta preparación de la floración.
Otro caso es el de Cataluña, donde, y con datos de enero, las plantas silvestres de esta comunidad están floreciendo entre tres y cinco meses antes de lo habitual, mientras que las orugas de la procesionaria llevan en los pinares desde el pasado diciembre, cuando lo habitual es verlas a finales de enero.
En este punto, Rubén Del Campo ha hecho hincapié en que los estudios fenológicos de Aemet, a día de hoy, muestran un pequeño adelanto estacional y aunque los últimos 30 días han dejado un ambiente invernal, con heladas generalizadas, sin embargo, ha recordado que el pasado mes de diciembre fue «extremadamente cálido», el más cálido de la serie histórica (1961).
¿Qué pasará que a partir de ahora?, de momento, -ha continuado el portavoz- la parte final de esta semana y los primeros días de la que viene, se prevén temperaturas más altas de lo normal con heladas que van a ir desapareciendo poco a poco, y con valores que este fin de semana registrarán entre 18 y 20 grados, incluso 22 grados de forma local en amplias zonas.
Serán ya «temperaturas primaverales», pero hay mucha incertidumbre porque aún no sabemos si esta tendencia primaveral va a continuar y cuáles serán sus consecuencias en la biología de la flora y fauna, ha concluido el portavoz de Aemet.
