¿Hay que obligar a los nietos a mantener relación con sus abuelos aunque no quieran?

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Pepa Losada

Una sentencia en Italia ha establecido que no se puede forzar a los menores si no quieren visitar a los abuelos. «Relacionarse con los abuelos es bueno,  siempre que sea dentro de un contexto de normalidad y que no sea fruto de la imposición», dice Nuria González Lois, psicóloga y mediadora familiar

03 feb 2023 . Actualizado a las 15:53 h.

Corre por las redes sociales últimamente una frase que dice que si hay que forzarlo, no es tu talla, y que eso se aplica para ropa, zapatos, anillos y también relaciones. La sentencia de un juzgado de Italia, que ha dicho que no se puede obligar a los nietos a mantener relación con los abuelos si no quieren, trae reminiscencias de esa frase.

El caso, que ahora ha resuelto un recurso de casación, ha estado abierto durante años en los tribunales. El tío y los abuelos paternos recurrieron a la Justicia ante los obstáculos que, según su relato, los padres ponían a los encuentros con los niños, ya que ambas partes de la familia tenían un conflicto abierto.

El tribunal de menores y la corte de Milán fallaron en principio a favor de los abuelos y de hecho se estableció un régimen de visitas supervisadas por trabajadores sociales mientras se alertaba a los padres del posible «daño psicológico» que podía suponer impedir la relación entre nietos y abuelos.

Los padres recurrieron y una instancia superior les ha dado la razón, estableciendo que no se puede obligar a los menores a tener relación con los abuelos si no quieren usando precisamente el mismo argumento: que prevalecía el interés de los menores sobre el derecho de los abuelos, más si tienen capacidad de discernir si quieren o no mantener una relación con ellos, al haber alcanzado los 12 años de edad durante el proceso.

«Evidentemente, relacionarse con los abuelos es bueno, sobre todo en los primeros años, cuando se establecen los vínculos de apego». Nuria González Lois, psicóloga y mediadora familiar, matiza sin embargo la regla general. En un proceso como ese, todo depende del vínculo que los menores tuviesen anteriormente con los abuelos y, sobre todo, que la relación debe darse en un «contexto de normalidad y que no sea fruto de la imposición», como parece haber sido el caso de Italia.

La doctrina española parece seguir la misma senda que el tribunal italiano, al entender que no se puede negar a unos abuelos el derecho a relacionarse con los nietos y que la relación es enriquecedora, pero que este derecho siempre está condicionado al bien superior del menor y, además, «debe entenderse sin perjuicio de tomar en cuenta la voluntad del menor que deberá ser oído al respecto».

Los padres de los dos menores argumentaban que los niños no estaban cómodos con los encuentros, más en un contexto de conflicto como el que imperaba. «Puede generar un conflicto de lealtades y los niños pueden quedar en medio», advierte la especialista. Ese tiempo compartido con los abuelos «puede ser contraproducente» en un contexto de enfrentamiento con los padres, ya que «se pueden generar sinergias negativas» y pueden aparecer comportamientos y conductas también negativas tanto por parte de los abuelos como de los padres. «Si hay conflictividad esa relación no va a ser buena para los menores».

¿Es habitual esta situación de enfrentamiento? «Ocurre mucho en los procesos de separación y divorcio, porque al final la familia se posiciona», dice la psicóloga y mediadora familiar. Esos posicionamientos, en ocasiones, llevan a que relaciones que hasta ese momento eran satisfactorias, o cuando menos cordiales, se deterioren hasta tal punto que se rompan. «Y los niños quedan en medio». 

El Código Civil protege la relación de los menores con sus parientes y allegados y existen en España casos en los que los abuelos reclaman un régimen de visita con los nietos y de hecho, la Justicia protege la relación entre ambos, al entender que los abuelos « desempeñan un papel fundamental de cohesión y transmisión de valores en la familia». Es también lo que destaca de la importancia del vínculo intergeneracional González Lois: «Son importantes los vínculos de apego, la autoridad moral, los valores éticos que transmiten. Y pueden también ser canales de comunicación».

Es más, los abuelos tienen un papel primordial en el desarrollo emocional de una persona. Y además, en no pocos casos son una figura de apego fundamental, ya sea por situaciones como las de la emigración que se dio durante mucho tiempo en Galicia (padres que emigraban y dejaban a los niños al cuidado de los abuelos) o por las circunstancias socioeconómicas actuales, en las que los abuelos tienen un rol activo en el proceso de crianza y educación. 

La cuestión es si una vez se produce el conflicto hay posibilidad de reconducirlo «Yo creo que sí, siempre hay», dice la psicóloga y mediadora familiar. Siempre y cuando no haya una causa que impida o desaconseje una relación fluida. «La mediación familiar es el espacio que puede permitir el acercamiento» y la posible restauración de los vínculos, explica.