Galicia disfruta de la alegría y los premios que dejó el sorteo del Niño

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

Tras el sorteo del Gordo de Navidad, que dejó 360 millones de euros en A Fonsagrada y A Coruña, la lotería del Niño pone el broche de oro a estas fiestas con premios en Galicia. Y es que parte del segundo premio y del tercero ha caído en la comunidad. Son el 72289, que se vendió, entre otras localidades, en Vigo, Cervo, Ordes, Lugo, O Carballiño, Ourense, Pontevedra y Cangas. Y el 18918, vendido en Lugo.

El segundo, en una librería

En la ciudad de Pontevedra la librería papelería Avenida, en la calle Eduardo Pondal, vendió parte del segundo premio. Cada décimo está premiado con 75.000 euros. La propietaria del establecimiento, Adela Vence, confirmó que vendió un décimo por máquina. Poco antes de la una del mediodía llegaba a la librería papelería el cartel de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) con el número agraciado.

Tercer premio millonario en Lugo

La suerte ha vuelto a sonreír a la provincia de Lugo. El Niño ha dejado 2,5 millones de euros en premios en la ciudad y otros 150.000 en Cervo, en A Mariña. Dos administraciones de la ciudad amurallada vendieron un décimo del 72289 (segundo premio) y diez series del 18918 (tercero).

El que tiene más valor es este último, vendido en la Administración de Lotería número 9 de Lugo, ubicada en la Ronda da Muralla. Allí, se despacharon cien décimos, diez series completas, que han repartido 2,5 millones de euros en total, 25.000 euros al décimo.

O Almacén de Cervo repartió a su vez dos décimos del 72289, dotado con 75.000 euros cada uno. Los boletos se expendieron por la máquina del local hostelero. La gerencia de la posada y restaurante no tenía constancia al mediodía de quiénes eran los agraciados.

El segundo, también en Vigo y Cangas

Vigo y Cangas están en la lista de municipios en los que se ha vendido el segundo premio del Niño. 

En una administración de la calle viguesa de Sanjurjo Badía, en el barrio de Teis, en Vigo, se han vendido dos décimos premiados a 75.000 euros cada uno (750.000 euros a la serie). Los responsables del local estaban exultantes y se declaraban «contentísimos» a la espera de que apareciese algún vecino afortunado.

Y también en el estanco de Rozabales, en la parrroquia de Aldán. «¡Estamos felices! Hemos repartido un segundo premio», confirma Chelo Millán, la dueña del estanco Rozabales de ese estanco de Cangas. Es un boleto azul con el número 72.289, premiado con los 75.000 euros al décimo. «Soy una chica que atrae la suerte y lo sabes» es el eslogan de la camiseta que luce esta mañana la vendedora del establecimiento más antiguo de Aldán, mientras celebra haber dado de nuevo un premio.

Ourense: el segundo por partida doble

Dos administraciones de la provincia repartieron un décimo cada una con el número premiado, el 72289, en total 150.000 euros —75.000 euros por boleto—. Uno de ellos se vendió en el bar Lérida de O Carballiño, donde su propietaria, Mónica Blanco, apenas se lo podía creer al enterarse de la noticia. «Siento mucha alegría, porque al final trabajamos duro todo el año y esto es una recompensa para los clientes y para nosotros», explica. Ella y su pareja regentan el bar carballiñés, en la rúa Norte, desde hace unos cinco años. «En este tiempo ya dimos un Euromillón, un tercer premio de la lotería de Navidad y algún que otro pellizco más y siempre es la misma ilusión y la misma sorpresa», confiesa Mónica. La hostelera cree que el décimo pudo quedarse en O Carballiño. «Aunque es cierto que cada vez tenemos más fama y por tanto viene gente de todas partes a comprar su lotería, entre nuestros clientes sobre todo hay vecinos», afirma. El equipo del Lérida no dudó en abrir una botella de champán y brindar para celebrarlo. «Nosotros no compramos ese número, pero nuestra suerte es que alguien del pueblo lo tenga», termina Mónica.

Otro décimo del 72289, ese segundo premio de la lotería del Niño, se vendió en el bar Iglú, en Barrocás. El propietario del local, Luis González, no era consciente ni de que había vendido el boleto. «No sabía que tocara y estoy encantado. Ojalá haya caído en el barrio», dice. «Llevamos 25 años aquí y ya hemos repartido algún premio antes, pero siempre es una alegría darle dinero a la gente», terminaba el hostelero de este bar situado en la plaza Quinientos.

Al menos un décimo del segundo premio, el 72.289, tocó en el bar 1X2 de Ordes, un histórico establecimiento en plena travesía de la N-550, enfocado especialmente a la venta de boletos de todo tipo de sorteos. Alberto Astray Loureda, de 27 años, es su dueño y es la primera vez que reparte un premio tan alto. Reconoce que no es consciente de quien o quienes se llevaron el número, un dato que espera conocer mañana. Eso sí, le viene a la memoria que quizá el boleto surgió tras una reunión de varias personas que terminaron encargando al menos un décimo que salió de la máquina, pero de momento es solo una conjetura.

Alberto Astray no abrió su local hasta las seis de la tarde, ya que compagina su negocio con el ocio nocturno al trabajar pinchando música en un local en Carballo. En él estuvo hasta las seis de la mañana, hora de la que se despidió diciéndo, a modo de broma: «marcho que mañá teño que dar un premio». Y la broma se convirtió en un sueño de 75.000 euros por décimo.