La gripe pierde fuerza en Galicia, pero el Sergas cree que lo peor está por llegar
SOCIEDAD
Advierte de lo excepcional de la temporada, con tres virus respiratorios circulando
02 dic 2022 . Actualizado a las 15:51 h.La gripe lleva siendo epidemia en España desde mediados de septiembre, cuando el umbral de los 50 casos por cien mil habitantes nunca se superaba hasta enero. «Regalo de Reyes», solían decir los epidemiólogos. Tras una temporada fantasma, con un agresivo coronavirus neutralizando el resto de infecciones respiratorias, dueño y señor de todo el espacio, el brote que tocaba este otoño-invierno es impredecible, coinciden todos los expertos. Se sabe que ha sido madrugador y que está afectando especialmente a niños y adolescentes. Se sospecha, además, que tumbará a más gente que otros años, porque la pandemia mantuvo a raya la circulación, dejando en mínimos la inmunidad natural. De ahí la importancia de la vacunación. Los datos del Ministerio de Sanidad confirman una tendencia nacional al alza, con una incidencia actual de 128 casos por cien mil habitantes, pero Galicia se sitúa a la cola en contagios. Es la tercera con menos afección de infecciones respiratorias. Las cifras de la vigilancia epidemiológica gallega revela además una ligera mejoría, con un descenso del número de consultas con respecto a la semana anterior.
Manda, sin embargo, la cautela, por lo excepcional de la temporada. «Non é doado predicir o que vai pasar, porque estamos nunha circunstancia nova. A difusión do virus respiratorio sincitial e da gripe creceron simultaneamente, e iso non é nada habitual, cando unha crece a outra baixa. E tamén temos a covid. Todo iso pode interactuar, a difusión dun virus pode entorpecer a difusión dos outros e xerar unha dinámica diferente á que estamos acostumados», explica Alberto Malvar, jefe de epidemiología del Sergas. «A baixada rexistrada no último informe [se aprecia en el gráfico] non é especialmente significativa, non como sería en anos pasados, pode seguir baixando, pero non a tomaría como definitiva», advierte.
El pico, en «una o dos semanas»
Tal es la incertidumbre que el propio conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, admitía el miércoles en Ourense que en su departamento no tenían nada claro que el pico ya hubiese llegado. «É máis, cremos que aínda se vai retrasar un pouquiño. Falabamos nunha primeira previsión de finais de novembro e principios de decembro, estamos aí xusto, pero agora pensamos que pode estar máis cerca da semana que vén ou da seguinte», aventuró.
En la semana del 21 al 27 de noviembre, vigilancia basada en los registros de gripe en la atención primaria del Sergas recopiló menos casos que en la anterior, lo que sumado al descenso —por segunda semana consecutiva— de la positividad de las muestras estudiadas en los laboratorios de los seis grandes hospitales gallegos permite calificar la tendencia de la actividad gripal como decreciente. La intensidad se mantiene en el nivel bajo, con 81 casos por cien mil habitantes. En concreto, la tasa de consultas descendió un 19 % con respecto a la semana previa, siendo más acusada esta caída en la provincia de Pontevedra (25 %) y en el grupo de edad de 5 a 19 años (29 %).
Los más jóvenes siguen siendo, sin embargo, los más afectados por esta anárquica oleada. Aún con la bajada, entre los 5 y los 19 años la tasa de incidencia se sitúa en los 222 casos por cien mil habitantes y en 166 por debajo de los cuatro años. Aumentan, además, las hospitalizaciones, con 103 ingresos de personas con gripe confirmada a lo largo de la semana pasada —un 25 % más que la anterior—. De cuidados hospitalarios precisan sobre todo los más mayores, pero también los niños. En lo que va de temporada, se notificaron al Sergas 753 ingresos con gripe, de los que 54 fueron derivados a ucis. Fallecieron 25, pero solo cinco como consecuencia directa de la infección.
Comesaña descarta vacunaciones infantiles masivas
Insisten desde el Gobierno gallego en lo crucial de vacunarse, un mensaje que quieren que cale especialmente en las personas mayores y los vulnerables, pero también en los niños, incluidos por primera vez en la campaña de pinchazos. Solo Murcia, Andalucía y Galicia inoculan a los más pequeños, y lo hacen con un objetivo doble: protegerlos a ellos y proteger a los que les rodean, a los que les cuidan. Cree Julio García Comesaña que es importante «seguir traballando nestes plans de continxencia» para «estar preparados para o pico». ¿Y si el pico ya hubiese pasado? Los datos de Sanidade muestran una cresta en la semana 43 —la del 19 al 25 de octubre— que los responsables de la vigilancia epidemiológica atribuyen, sin embargo, a un desajuste. «Ás veces pasa que calquera cambio na orixe dos datos produce alteracións —aclara Alberto Malvar—. A serie habería que seguila obviando o remonte».
Un total de 5.000 menores gallegos de entre seis meses y cinco años recibieron el fin de semana pasada la vacuna contra la gripe en el dispositivo habilitado en los 14 hospitales públicos de la comunidad. Casi la mitad de los niños de esta franja están ya protegidos. ¿Habrá vacunaciones masivas para administrar la inyección a los que aún no la tienen? «Cremos que non», respondió el conselleiro este miércoles preguntado al respecto. «Animamos aos pais e nais a que vaian aos centros de saúde e vacinen aos seus nenos», añadió.
El adelanto de la temporada preocupa a la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió ayer del temprano inicio de la epidemia de gripe estacional en Europa en un contexto de aumento del virus respiratorio sincitial (VSR) —el que provoca infecciones de los pulmones y en el aparato respiratorio, sobre todo en niños pequeños pero también en adultos— y mientras aún no se ha erradicado la pandemia del coronavirus. «La región está experimentando una circulación creciente de gripe y del virus sincitial. Teniendo en cuenta que el covid-19 sigue ahí, se espera un alto impacto este invierno en la población y en los servicios de salud», avisó a través de un comunicado el director de la OMS-Europa, Hans Kluge.
Recuerda la OMS que las vacunas reducen las posibilidades de contagio y también el riesgo de complicaciones, de contraer enfermedad severa de covid-19 o de gripe. En definitiva, subraya que las inyecciones salvan vidas. Insta, por tanto, a vacunarse, tanto de gripe como del SARS-CoV-2, especialmente si uno es mayor o pertenece a un grupo vulnerable. La gripe de tipo A provoca enfermedad severa en la mayoría de la población anciana o con enfermedades crónicas, advirtió Kugle, animando también a recuperar medidas de protección individual como la higiene de manos, la ventilación de los espacios concurridos o la utilización de mascarillas en lugares en los que haya mucha gente.
Un número creciente de personas, casi la mitad mayores de 55 años, está siendo ingresada por gripe en los hospitales europeos, que han registrado aumentos de casos desde octubre. En cuanto al VSR, alrededor de 20 países, de los 53 que conforman la región europea de la OMS —que incluye a Rusia y a varios países de Asia Central— han notificado un incremento de la incidencia.
Alerta en Francia por el elevado número de contagios de gripe A
Las autoridades sanitarias francesas dieron ayer la voz de alarma por el elevado número de contagios de gripe registrados en el país, que ya alcanzan niveles de epidemia en la zona noroeste y de pre-epidemia en buena parte del territorio, París incluido. Circula, sobre todo, el virus de la gripe A.
En general, hay en todo el territorio metropolitano un «aumento precoz de los indicadores de la gripe», de acuerdo a la institución de vigilancia sanitaria, con circulación mayoritaria del virus A subtipo H3N2. La semana pasada, se registró una incidencia de 154 casos por cien mil habitantes, lo que supuso un incremento del 51 % con respecto a los siete días anteriores. También aumentó en la misma proporción el número de casos que fueron atendidos en los servicios de urgencias —un total de 1.742 entre el 21 y el 27 de noviembre— y 142 de ellos precisaron de hospitalización (un 38 % más que la semana previa).
Respecto a la bronquiolitis, los niveles de hospitalizaciones continúan al alza y son «superiores a los de las epidemias de los diez últimos años» desde hace varias semanas, advierte el Gobierno galo. Solo la semana pasada esta enfermedad fue la causa de 8.647 visitas a urgencias.