Irene Montero admite que no hay acuerdo con el PSOE sobre la ley trans

La Voz

SOCIEDAD

Kiko Huesca | EFE

Los socialistas mantienen sus enmiendas para que los menores de entre 12 y 16 años necesiten autorización de un juez para poder cambiar de sexo en el registro. La ministra advierte que la suma de votos del PSOE y PP puede producir recortes de derechos en la infancia trans

28 nov 2022 . Actualizado a las 12:36 h.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha explicado este lunes que no se ha logrado un acuerdo con el PSOE en relación con la ley trans y que, por tanto, los socialistas mantienen sus enmiendas para cambiar el proyecto para que los menores de 16 años y mayores de 12 necesiten autorización de un juez para poder cambiar de sexo en el registro. En declaraciones en TVE, Montero ha asegurado que seguirán negociando en las horas por delante que quedan para «reconducir» la situación y alcanzar un «acuerdo con el PSOE y los grupos de la mayoría feminista».

«El PSOE ha decidido presentar enmiendas y no buscar acuerdos», ha lamentado la ministra, quien ha advertido que «los votos del PP y los del PSOE pueden sumar para recortar derechos de las infancias trans». La responsable de Igualdad ha reconocido su preocupación por esta situación y ha destacado que los derechos de las personas trans son derechos humanos. «Debemos respetar el acuerdo de Gobierno, porque costó mucho alcanzarlo y no podemos defraudar a los trans», ha añadido Montero, insistiendo en que hay una sentencia del Tribunal Constitucional que marca la obligación de garantizar ese derecho a las infancias trans.

«Estoy preocupada porque el PSOE me ha transmitido que no quiere ese acuerdo y voy a seguir trabajando para que esto no ocurra», ha concluido.

El PSOE no da por cerrada la negociación

Tras las declaraciones de Irene Montero, el PSOE ha precisado que no da por cerrado ningún proceso de negociación. Fuentes socialistas han explicado a Efe que mantienen sus enmiendas y que esta decisión está dentro de lo que todavía es el trabajo parlamentario de cualquier texto legislativo. «El PSOE no ha dado por cerrado ningún proceso de negociación respecto a esta ley», aseguran, e insisten en que su objetivo no es otro que garantizar la seguridad jurídica de la norma y su blindaje respecto a los «más que previsibles» recursos al Tribunal Constitucional del PP y la ultraderecha.

A pesar de la urgencia del Ministerio de Igualdad por sacar adelante la ley antes de que finalice el año, esta semana sigue sin constituirse la ponencia que debe redactar el dictamen de la ley y el debate se prevé complicado. Además, el proyecto de ley trans pasará de nuevo por el pleno de la Cámara Baja, a petición del PP, para su aprobación antes de ir al Senado y no solo por la Comisión de Igualdad, como en un principio se acordó al ser una tramitación parlamentaria de urgencia.

Unidas Podemos, que llegó a acusar al PSOE de retrasar la tramitación del proyecto al pedir sucesivas ampliaciones del plazo para presentar enmiendas, ha aceptado el nuevo debate por «cortesía parlamentaria». En el proyecto remitido por el Gobierno al Congreso, la intervención del juez quedaba limitada a los menores de 14 y mayores de 12; entre los 14 y los 16 años bastaba con que estuvieran asistidos por padres o tutores, mientras que el PSOE ha planteado exigir que un juez autorice el cambio de sexo registral a los menores de 16 años y mayores de 12. Es, para Igualdad y para los colectivos LGTBI, una ley «de mínimos» que debe ser respetada, pero sectores del PSOE y parte del movimiento feminista cuestionan la libre autodeterminación del género.