Según medios de comunicación estadounidenses, ya viven por separado y podrían estar tramitando la división de su patrimonio
06 oct 2022 . Actualizado a las 22:37 h.El pasado mes de febrero, la estrella mundial de fútbol americano Tom Brady sorprendía anunciando su prematura retirada del deporte. A sus 45 años recién cumplidos, decidía poner punto y final a su carrera para centrarse en su faceta como empresario y en su vida familiar, que desde hace catorce años comparte con la supermodelo Gisele Bündchen. No obstante, la decisión no tuvo largo recorrido. Un mes y medio después de anunciar la noticia, volvía al campo de juego. A raíz de esto, varios medios estadounidenses comenzaron a hablar de distanciamiento en la pareja. Ahora, según ha avanzado el portal Page Six y han confirmado fuentes cercanas a la pareja en el canal CNN y la revista People, se cumplen los peores presagios. Ambos habrían contratado abogados para iniciar los trámites de divorcio.
Según revela el citado portal, el motivo de la separación definitiva habría sido una pelea. Desde entonces, habrían estado viviendo por separado. «Nunca pensé que esta discusión sería el final de ellos, pero parece que lo es», señala una fuente cercana a la pareja que prefiere permanecer en el anonimato. «No creo que haya ningún regreso ahora. Ambos tienen abogados y están analizando lo que implicará una división, quién se queda con qué y cuáles serán las finanzas», añade.
Tal y como explica el tabloide neoyorquino, la pareja se habría puesto de acuerdo para dividir sus activos, que incluyen una serie de propiedades valoradas en 26 millones de euros. Entre ellas, una casa en Miami valorada en 17 millones. Según Reuters, la que llegó a ser la modelo mejor pagada del mundo tiene una fortuna que ronda los 400 millones de dólares, mientras que Brady ha sido nombrado este año por Forbes como el noveno atleta mejor pagado del mundo.
Otras fuentes cercanas al siete veces campeón de la Super Bowl y la supermodelo dicen que ambos están involucrados en la custodia de sus hijos y que, en todo caso, la compartirían. Fruto de sus años juntos, la pareja tuvo a Benjamin, de doce años, y a Vivian, de nueve. Brady también es padre de Jack, de quince, a quien tuvo con su expareja Bridget Moynahan.
La pareja inició su relación en el 2006, y se casó en secreto en el año 2009. Solo asistieron su familia y amigos más cercanos. Desde entonces, han vivido juntos en la ciudad de Miami.