Alaska defiende a Íñigo Onieva: «Vamos a ver, ¿ahora es Jack, el destripador?»

Martín Bastos LA VOZ / REDACCIÓN

SOCIEDAD

MARISCAL | EFE

La cantante, junto a Mario Vaquerizo, carga contra las críticas hacia el empresario. Este martes el exnovio de Tamara completa la mudanza del piso que compartían

04 oct 2022 . Actualizado a las 20:26 h.

Desde que se hizo pública la ruptura entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva —tras haberse filtrado unos vídeos en los que el empresario aparecía besando a otra mujer—, muchas han sido las personalidades que, en los últimos días, han mostrado públicamente su apoyo y comprensión a la socialité. Los últimos en declarar sobre el tema, Alaska Mario Vaquerizo. No obstante, su posicionamiento difiere de la tendencia mayoritaria. 

La intérprete de Ni tú ni nadie carga contra los ataques hacia Onieva por parte de la opinión pública. Para ella, la ruptura debería de quedar entre ambos. «Tamara tiene todo el derecho a decir que se siente engañada porque lo ha estado, pero los demás no», asegura mientras defiende que lo que se ha convertido en polémica «es solo cosa de Tamara». «Vamos a ver, ¿ahora Íñigo es el 'degollador de Boston' o Jack, 'el destripador'? No», añade.

Mario Vaquerizo, por el contrario, prefiere mantenerse imparcial ante la mediática ruptura. «Yo no soy de nadie, soy del amor. Yo quiero que a todo el mundo le vaya bien, pero también es cierto que cuando las parejas o el amor desaparece, hay que dejarlo», indica.

Desde que saltó el escándalo, Onieva, a diferencia de Falcó, se ha mantenido al margen del foco mediático. Vaquerizo, que siempre ha sido transparente al compartir su vida privada con la prensa, no se olvida de comentar este hecho: «El día que me separe, yo lo diré. Si me hubiera pasado eso, no me habría escondido».

Nunca perdonarían una infidelidad

La pareja es amiga estrecha de la aristócrata, que incluso llegó a salir en un episodio de su serie Alaska y Mario. «Obviamente soy mucho más amigo de Tamara, pero me caen bien los dos y tampoco puedo estigmatizar a Íñigo porque no me ha hecho nada. Tendríamos que aprender que las rupturas no son fáciles para ninguna de las partes, y más con la proyección que ellos tienen». indica Vaquerizo.

Alaska admite que siente adoración por la marquesa de Griñón «desde que era pequeñita». Para ella, al igual que para Falcó, la fidelidad es un aspecto fundamental, y admite que jamás pasaría una infidelidad por alto en su matrimonio. «Las he perdonado en relaciones anteriores y no conduce a nada porque al final siempre estás con la mosca detrás de la oreja», explica.

No obstante, reconoce que su pensamiento ha ido cambiando con la edad: «Cuando tienes 20, 25, 30, 35, no lo ves así». Lo mismo opina Mario Vaquerizo, «porque para eso me comprometo y estoy casado».

Alaska y Mario llevan veintitrés años casados. A pesar de que hace unos meses se especuló una grave crisis en su relación, siguen felices como el primer día. Para la cantante, el secreto de su éxito es el amor que ambos sienten. «El amor... Triunfan las ganas de que triunfe y muchas veces claro que te peleas, ha habido algunos momentos mejores que otros, pero sigues teniendo que tener ganas, tú no lo puedes impostar. Las ganas no te las puede quitar nadie y no las puedes fabricar», confiesa.

Íñigo Onieva se muda

Desde que saltó a la luz pública la polémica por la infidelidad y la ruptura con Tamara Falcó, Íñigo Onieva ha estado desaparecido. Nadie que no sea su familia ha vuelto a verlo ni saliendo de la casa de su madre ni en el piso que compartía con Tamara Falcó.

Este martes, a media mañana, un camión de mudanzas ha llegado al piso en el que vivía la pareja, en el madrileño barrio de Las Salesas, y ha sacado todas las pertenencias del joven. Una decena de cajas de tamaño mediano, numerosos portatrajes e incluso un llamativo casco de moto color amarillo flúor, que diferentes operarios han sacado del edificio y han trasladado a la casa de su madre, Carolina Molas, en la exclusiva urbanización de La Moraleja.