¿Qué pasa con los «thrillers» belgas?

María Vidal Míguez
María Vidal SERIES

SOCIEDAD

Netflix

27 ago 2022 . Actualizado a las 10:51 h.

No estoy abonada a las producciones belgas, así como en su día sí que lo estuve a las nórdicas, pero algo deben de tener estos «thrillers» cuando últimamente escalan sin problema en el ránking de los favoritos de los usuarios de las plataformas. Y aunque nos resistamos, estas clasificaciones dirigen con frecuencia nuestro mando a distancia. Si hace unos días les animaba a disfrutar de «Dos veranos», hoy estas líneas son para «Una madre perfecta» —una coproducción francesa, belga y alemana— que invita a reflexionar sobre cómo a veces los padres confiamos a ciegas en la inocencia de nuestros hijos. Eso es lo que le sucede a Hélène Berg. Su tranquila vida da un giro inesperado cuando recibe la llamada de su hija Anya desde París, donde ella vivió de adolescente, para decirle que la han detenido como sospechosa de un asesinato. Hélène recurre a un viejo amor de juventud, que ahora trabaja como abogado, para sacarla cuanto antes de este embrollo. Sin embargo, poco a poco empezará a descubrir verdades que harán que esa línea que separa a la víctima del verdugo sea cada vez más fina. A medida que avanza en su investigación ve cómo las pistas que va reuniendo lejos de salvar a Anya, la incriminan. Pero esa lucha a contracorriente por defender a su primogénita mantiene en vilo al espectador durante los cuatro capítulos, con una pregunta constante: ¿ y si la hija no es tan inocente?