El SOS de los bancos de alimentos: «Las donaciones han caído en picado, el tema está fastidiado para todo el mundo y la gente tiene miedo»

SOCIEDAD

Carlos Castro

Animan a los gallegos a colaborar porque «cada vez hay más necesidad»

17 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Los bancos de alimentos de Galicia se dejan la piel cada año para ayudar a miles de familias que tienen problemas para comer a diario. Pero la pandemia, la guerra y la infracción creciente han hecho que este año el Mayo Solidario, capitaneado por Gadis, no esté resultando tan bueno como los anteriores.

Amadora Núñez presidenta del Banco de Alimentos de Lugo, asegura que «las donaciones han caído en picado, se nota que la gente está con miedo, aunque aún así nos ayudan. Pero si antes dejaban una bolsa ahora te dejan dos kilos. Es comprensible, porque el tema está fastidiado para todo el mundo». De momento las cifras hablan de una recogida que casi es la mitad de otros años. «Tenemos que dar las gracias y pedir al a gente que siga colaborando porque es terrible. Hay mucha necesidad. Ahora tenemos refugiados de Ucrania, pero también de otros muchos países. Estamos luchando, pero antes se llevaba el cliente su bolsita y te dejaba un carro; mientras que hora es al revés». La recogida se realiza en los supermercados Gadis, que después lo distribuyen entre los distintos bancos gallegos. «La gente tiene miedo —insiste Amadora—, y encima hay los clásicos agoreros que dicen el 2023 va a ser un año terrible. ¡Claro que hay dificultades!, para eso estamos ahí, para ayudar a que vaya mejor la cosa».

Por su parte, desde el Banco de Alimentos Rías Altas confirman esta realidad. «La sensación es que no hay esa euforia que hubo el año de la pandemia, por ejemplo —asegura uno de sus portavoces—. Lo achacan a la inflación, porque en estos supermercados de barrio son gente de compra diaria, y si la subida es real y efectiva, todos los días ir al súper te supone un sablazo». Además, recuerdan que la multiplicación de campañas de donación ha saturado un poco el animo solidario de los gallegos. «Las campañas pidiendo alimentos una y otra vez por las diferentes causas acaban saturando», aseguran como posible causa de la bajada de aportaciones, aunque apuntan también que «ahora también hay donaciones en caja y esas no las controlas hasta el final».

Las aportaciones bajan, pero la demanda no para de subir. «Nosotros estamos atendiendo a diez o doce entidades más que hace un año, y los beneficiarios pasaron de 25.000 a 27.000 en la provincia de A Coruña, por ejemplo. Además, cada vez piden más alimentos por beneficiario, la demanda es superior».

Lo que está claro es que los voluntarios son más necesarios que nunca. «Nosotros tenemos una base de datos de unas mil personas, aunque operativos realmente vienen siendo unas 500, que es muchísimo, aún así. Pero para Gadis, por ejemplo, nos hacen falta 16 personas cada fin de semana por supermercado, y son unos 50».