España necesita un millar de anestesiólogos más para cubrir las demandas de la población

Elisa Álvarez González
E. Álvarez SANTIAGO

SOCIEDAD

CEDIDA

Ante el déficit de especialistas, estos profesionales piden optimizar los recursos y prescindir de algunas pruebas

21 abr 2022 . Actualizado a las 19:16 h.

Cada vez el ciudadano demanda más vivir sin dolor y que los procedimientos clínicos se hagan sin tener molestias. Es una reivindicación lógica. Por eso el déficit de anestesiólogos es cada vez mayor. Se necesita un millar más en España, pese a que son la segunda especialidad más numerosa, solo detrás de los médicos de familia. Santiago acoge desde este jueves el Congreso Nacional de la Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (Sedar), que por primera vez se celebra en Galicia y registra un récord de participantes (casi 1.600).

Tradicionalmente vinculados a los quirófanos, los anestesistas forman parte cada vez más de otros servicios: unidades del dolor, cirugía ambulatoria, unidades de críticos, pruebas que requieren sedación... Los especialistas abordan en este foro cómo optimizar los limitados recursos, cómo reducir las listas de espera de los procesos más complejos y cómo mejorar la eficiencia del sistema.

Servando López, presidente del comité organizador y especialista en el Chuac, y Pilar Argente, presidenta del comité científico, explicaron los objetivos de este encuentro en el que se tratará de elaborar un documento sobre la gestión de la cirugía de las cataratas. Todos los días se operan cuatro mil en los hospitales españoles, lo que demanda cuatro mil consultas y la presencia de un especialista en anestesia en cada una de ellas. Los profesionales avalan la reducción de las pruebas preoperatorias en esta intervención, con lo que se optimizarían los recursos. 

Gran papel en la pandemia

El papel de los anestesistas cobró especial relevancia durante la pandemia, ya que gracias a su trabajo se pudieron duplicar, e incluso triplicar, el número de camas UCI durante la primera ola. Pero estos especialistas no han tenido un momento de bajada de actividad «somos como el perejil, estamos en todas las salsas», apunta Pilar Argente, por lo que reclaman a las administraciones sanitarias apoyo y una reducción de la presión tras las secuelas psicológicas y el cansancio emocional que han sufrido en estos años.