A lo que West contestaba con insultos racistas, expresamente prohibidos en la red social, lo que le acarreaba la sanción. El rapero siempre ha sido un personaje complejo que ha tenido enfrentamientos con numerosos rostros conocidos, incluyendo a Wiz Khalifa o Taylor Swift. Ahora, el objeto de su ira es la pareja de su exmujer. Entre sus últimas publicaciones había dos videoclips en los que aparecía la imagen de Pete Davidson siendo torturado.
Un mensaje que la influencer entendió como un ataque directo. Su comportamiento está valiendo también como argumento para respaldar la petición de divorcio de la empresaria. «El señor West, por medio de sus acciones ha dejado claro que no acepta que la relación conyugal de las partes se acabó», dice en la solicitud de divorcio. «Ha diseminado en redes sociales comunicaciones privadas entre las partes y desinformación sobre asuntos familiares personales y de crianza de los hijos, lo que ha causado estrés emocional», continúa. Razón por la que Kim expresa: «Deseo profundamente estar divorciada. (.) Creo que si la Corte termina con nuestro estatus marital esto ayudará a Kanye a aceptar que nuestra relación conyugal se acabó».