Cinco de los chefs más prestigiosos del mundo le prepararán el menú ofrecido como pago
24 feb 2022 . Actualizado a las 20:13 h.Ya hay fecha, lugar y menú. Robert de Niro estará en Madrid el próximo 1 de marzo para disfrutar de una comida impagable cocinada por cinco de los chefs más prestigiosos del planeta. El actor estadounidense responde así a la invitación formulada por Madrid Fusión Alimentos de España el pasado mes de mayo, cuando le ofreció promocionar el congreso gastronómico sin cobrar un euro, pero a cambio de un banquete irrepetible. De Niro recogió entonces el guante y ya se prepara para una velada histórica que tendrá como escenario la Suite Real del hotel Ritz Mandarin Oriental. Será el primer aperitivo para el vigésimo aniversario de la cumbre culinaria, que se celebrará en la capital del 28 al 30 de marzo.
En los fogones de la propia suite -cuyo precio por noche ronda la friolera de 20.000 euros- cocinará un equipo de all stars integrado nada menos que por Mauro Colagreco, Joan Roca, Quique Dacosta, José Andrés y Martín Berasategui. Los dos primeros han sido número 1 del mundo en la última década, Berasategui es el chef de habla hispana con más estrellas Michelin y José Andrés, reciente Premio Princesa de Asturias de la Concordia, es uno de los españoles con más proyección en Estados Unidos. Dirige el equipo el valenciano Quique Dacosta, con 6 macarons en sus diferentes restaurantes, que desde hace poco más de un año está al frente de la oferta gastronómica del histórico hotel madrileño.
Es la primera vez que los cinco se reúnen para cocinar al alimón un menú cuyo precio sería difícil de cuantificar. Sí se puede calibrar el caché de la estrella de Hollywood para un evento de este tipo, que según las agencias del sector podría alcanzar entre 300.000 y tres millones de dólares en función de la campaña. El actor, de 78 años, no es nuevo en los círculos gastronómicos, ya que es socio del grupo de restaurantes Nobu, dirigidos por el chef japonés Nobu Matsuisha, y ha sido propietario de hoteles en el barrio neoyorquino de Tribeca. Quizá por eso la productora Attic Films puso el objetivo en él a la hora de diseñar la campaña de promoción de la pasada edición de Madrid Fusión.
Entonces se difundió en redes sociales un original vídeo en el que mostraba al supuesto abogado del Madrid Fusión, interpretado por el actor Larry Tales, presentándose en el despacho del actor para hacerle «una oferta que no podrá rechazar». El trato consistía en promocionar el congreso madrileño pero sin cobrar un duro. A cambio le ofrecían una cena «de valor incalculable». Bajo la etiqueta #robertsayyes, el vídeo corrió como la pólvora por las redes sociales y logró abrirse camino hasta el círculo del actor. Apenas dos días después, el protagonista de Taxi Driver, El Padrino o Toro Salvaje aceptaba la invitación con un escueta publicación en la que, mirando a cámara decía: «Estoy dentro, por supuesto que estoy dentro. Gracias Madrid Fusión. Nos vemos cuando vaya para allá». Pues bien, la leyenda del cine ya está haciendo las maletas.
En el menú, a falta de cerrar los últimos detalles, estarán algunas de las recetas más célebres de cada uno de los chefs. Al parecer Colagreco se encargará de una de las entradas y probablemente del postre; Berasategui, por su parte, tirará de repertorio clásico con sus tacos de merluza con kokotxas o con un milhojas caramelizado de anguila ahumada que creó escuela allá por el año 1993; mientras que Joan Roca prepara una suerte de comtessa de espárragos blancos y trufa, inspirada en aquella tarta helada de la infancia. También probará De Niro la gamba roja de Denia, hervida en agua de mar por el propio Quique Dacosta.
Este impresionante menú es solo el aperitivo de la vigésima edición de la cumbre culinaria más influyente del mundo. Chefs y gastrónomos de todo el planeta se darán cita en la capital española del 28 al 30 de marzo para participar en el congreso que nadie se quiere perder. Madrid Fusión sirve de foro de debate, feria de negocios y escaparate de nuevas tendencias para un oficio que ha visto disparado si impacto en la cultura popular en las últimas dos décadas. Hasta poner a los cocineros casi a la altura de las estrellas de Hollywood.