La coreógrafa Miryam Benedited trabajó en varias ocasiones con Chanel, la más votada por los expertos, que finalmente ha resultado la elegida para viajar en mayor a Turín. El voto popular, tanto el televoto como el demoscópico, fue sin embargo para Tanxugueiras
31 ene 2022 . Actualizado a las 16:39 h.Nunca falla. No existe preselección de Eurovisión en España sin eurodrama. En el recuerdo, los gritos de tongo a Manel Navarro, el bochorno de John Cobra y la jugada maestra de El Terrat enviando a Rodolfo Chiquilicuatre, por mencionar unas cuantas. Y en la final de este sábado, de la que ha salido la representante que en mayo viajará a Turín, ha vuelto a quedar en evidencia que algo raro pasa: el desfase entre la opinión popular y la de los expertos fue tan pronunciado que los espectadores solo pueden explicárselo pensando mal. En las redes sociales el mensaje es atronador: escándalo es la palabra más repetida desde que el jurado anunció 30 escasos puntos a unas Tanxugueiras a las que el voto popular colocó en el primer puesto (el demoscópico les dio 30 y el televoto otros 30, la máxima puntuación).
A Eurovisión irá Chanel, aupada por el tribunal contra el criterio del espectador. Se habla de favoritismo, de resultado orquestado, de injusticia, de manipulación y de «tongazo». Ya las pandeireteiras contaban con el hándicap de quedarse sin el apoyo de los expertos en la semifinal, lo que hacía sospechar que tampoco este sábado les abrirían los brazos. El día clave, los cinco miembros de este comité de decisión relegaron a Tanxugueiras a la quinta plaza, por detrás de Rayden e incluso de Blanca Paloma. Sus simpatías fueron para Rigoberta y sobre todo para Chanel. Solo Varry Brava y Gonzalo Hermida, que no pudo actuar al dar positivo por covid, quedaron por detrás de la candidatura gallega.
Varios perfiles destaparon estos tres últimos días los vínculos que curiosamente Miryam Benedited, miembro del jurado del festival, tiene con algunos de los aspirantes. El más obvio sería con Chanel, a la que estos seleccionadores profesionales, que suman un 50 % de los votos, habían valorado ya como la mejor de la primera semifinal y a la que este sábado le asignaron los 51 puntos. Actriz y bailarina en varios musicales y programas de televisión, Chanel es una vieja conocida de la coreógrafa, que actualmente trabaja en Tu cara me suena. Antes estuvo en varias ediciones de Operación Triunfo y se encargó de los bailes de una serie mítica como fue Upa Dance. Además, tiene en su haber la coreografía que llevó Edurne a Eurovisión en el 2015, con la que quedó en el puesto 21º. No ayudan a despejar la sombra de la duda las declaraciones de Màxim Huerta, en las que reconoce que los dos miembros internacionales del jurado estaban «on fire» con Tanxugueiras y que fueron las tres integrantes españolas las que hundieron sus posibilidades valorando poco la actuación del trío gallego.
Chanel fue durante un tiempo una de las bailarinas de Tu cara me suena, por lo que se conocen desde hace años y uno de los artistas que acompaña a Chanel trabaja con Benedited. Las dos tienen publicadas en sus cuentas de Twitter varias imágenes juntas de hace años.
Las fotografías datan del 2015 y del 2016 y los eurofanes más avispados ya se habían dado cuenta de esa relación cuando TVE dio a conocer los nombres que componían el jurado profesional. De hecho se refirieron a ellos como profesionales «objetivos y rigurosos» cuyo objetivo es valorar tanto la parte musical como la artística. «Todos conocen el certamen o han trabajado incluso en él», destacó entonces Eva Mora, jefa de la delegación española en el festival.
No es lo único que relaciona a Benedited con alguno de los aspirantes. Su mano derecha, Borja Rueda, que también trabaja en Tu cara me suena, es el artífice de la coreografía de Rayden con su Calle de la llorería.
Rayden también puso la voz junto a Ana Mena de un número musical que supuso el pistoletazo de salida a la ceremonia de entrega de los premios Goya del año 2020, cuya coreografía también es obra de Myriam Benedited y Borja Rueda.
El voto del jurado, clave para el resultado
La opinión del jurado profesional es clave en la elección del ganador del Benidorm Fest. La nota final se reparte al 50 % entre la decisión del tribunal y la elección del público, pero, con las matemáticas en la mano, la brecha entre ambos es abismal y muy difícil de salvar. Es exactamente lo que ha sucedido. La decisión de cada uno de los cinco miembros del jurado vale un 10 % de la nota final, mientras que harían falta miles de votos particulares para obtener un porcentaje similar.
El voto popular en la final se reparte entre las llamadas y SMS del televoto, que valen un 25 %, y el sondeo demoscópico, que suma otro 25 %. Su traducción en puntos no es porcentual: los concursantes se colocan en un orden equivalente al número de apoyos recibidos y, en función de eso, se les asignan 30, 25, 20, 18, 15, 12, 10 y 5 puntos. De esa manera, si la primera canción recibe 20.000 votos del público y la segunda solo 5.000, en la conversión solo habría 5 puntos de diferencia (30 frente a 25). Resulta muy difícil compensar una mala valoración del jurado.
En la primera semifinal, se registraron más de 42.000 votos del público (16.854 llamadas y 25.197 SMS). En la segunda semifinal, a pesar de que la audiencia del programa creció y reunió a 700.000 espectadores más en el conjunto de España, la cifra de votos cayó en picado y no llegó ni a la mitad, lo que podría ser el reflejo de un apoyo popular masivo a Tanxugueiras registrado el primer día. El jueves se contabilizaron 17.533 votos, de los cuales 4.266 fueron por llamadas a RTVE y 13.266 por SMS.
Tras los polémicos veredictos de las semifinales, RTVE salió a defender la labor del jurado del Benidorm Fest y pidió «respeto» para su labor. «Sus miembros tienen sus gustos y opiniones, pero queremos insistir en que es un jurado profesional y así hizo sus valoraciones. No sabían qué estaba votando el de al lado ni se pusieron de acuerdo», aseguró María Eizaguirre, directora de comunicación de la corporación pública en la rueda de prensa que ofrecieron con Azúcar Moreno y Unique.
Las propias Tanxugueiras aseguraban en rueda de prensa posterior a su primera actuación que «el jurado tiene sus criterios y hay que respetarlos». «Son cinco personas y cada una tiene sus gustos -consideraron-. Igual si dentro de un año nos volviésemos a presentar habría cinco personas diferentes y el resultado sería también distinto». Las gallegas ya avanzaron entonces que no esperaban que el jurado cambiase sustancialmente su posición en la final. «Sabemos que es gente que tiene las ideas muy claras. Nosotras intentaremos afinar un poco más y a ellos le pedimos que abran un poquito las miras», lanzaron.