El primer ministro, Jean Castex, constató en un mensaje en Twitter que el dispositivo había sido validado en «casi todos los artículos adoptados por el Parlamento» y confirmó su entrada en vigor el próximo lunes 24.
La ley, impulsada por la mayoría presidencial del centrista LREM y sus socios y apoyada por el centro-derecha (Los Republicanos) y la izquierda moderada de los socialistas, encontró la férrea oposición de los extremos, tanto en la derecha como en la izquierda.