La firma israelí de lujo tras el estilismo más deseado de Carrie Bradshaw en su esperado regreso

Gloria Salgado MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Caitlin Ochs | Reuters

Sarah Jessica Parker sigue los pasos de Audrey Hepburn o Michelle Obama en su idilio con una casa de moda que tuvo su punto álgido en los 50 gracias a sus bordados

21 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La primera casa de moda israelí fue Maskit. Su nombre proviene de la Biblia y significa algo pequeño y bonito, como una joya. Fundada a principios de los años 50 por la visionaria Rut Dayan e inspirada en el vestuario de los inmigrantes, a los que proporcionaba trabajo, actualmente está dirigida por Sharon Tal. La diseñadora, de 35 años, trabajó con Lanvin y fue responsable de los bordados de las colecciones de Alexander Mcqueen durante dos años y medio, periodo en el que vistió, entre otras celebridades, a Lady Gaga.

La diseñadora dejó apartada su pasión por la moda cuando se quedó embarazada, momento en el que decidió regresar a a Israel. Aunque su retirada fue por poco tiempo. Ver por televisión el vestido de novia de Kate Middleton, creación de Mcqueen, fue un revulsivo para ella. Desde entonces, la modista ha conseguido devolver el esplendor a Maskit con la colaboración de Dayan, que falleció a principios del 2021, a los 103 años. La firma antaño colaboró estrechamente con Yves Saint Laurent, Givenchy y Dior gracias a sus fascinantes y elaborados bordados étnicos con técnicas tradicionales de Hungría, Bulgaria, Yemen, Palestina y Líbano. Audrey Hepburn fue sólo una de las estrellas que lució su diseño más popular, el abrigo del desierto, que también tiene en otra de sus impecables versiones la ex primera dama estadounidense Michelle Obama.

Maskit, en la década de los 50, vendió en Bergdorf Goodman, Neiman Marcus y Saks Fifth Avenue, además de tener diez tiendas en Israel y una en la Quinta Avenida de Nueva York. Una ciudad a la que ha vuelto por todo lo alto. La firma es la responsable de uno de los mejores estilismos de Carrie Bradshaw en el regreso de la serie Sexo en Nueva York. Se trata de un maravilloso caftán de seda en el que se han invertido 300 horas de bordado a mano para crear la imagen de un pavo real.

Precisamente esa pieza, que se puede por conseguir por encargo a la casa israelí por 9.350 euros, preside el escaparate de la tienda temporal de 170 metros que Maskit ha abierto durante tres meses en Soho neoyorquino, situada en el número 74 de Wooster Street, junto a Celine, Gucci, Moschino o Chanel. En ella también se puede adquirir, por 88 euros, una de las camisetas de edición limitada en la que la propia Sharon Tal ha pintado una pluma del pavo real como la del popular caftán.

Tal y Parker ya se conocían desde el 2019, cuando la actriz visitó el estudio de Maskit, en una visita a Israel. El taller, que también es tienda, está ubicado en un impresionante edificio construido hace 250 años el que todas las prendas están hechas a mano. Cuando Sarah Jessica Parker empezó a trabajar en los nuevos capítulos de la serie envió un mensaje a Sharon Tal diciendo que quería crear un vestido con ella para el esperado primer episodio.

Debido a las restricciones de viaje por el coronavirus, lo hicieron a través de Zoom durante varios meses, incluyendo las pruebas. «Es un gran honor y mi sueño personal se está cumpliendo», comentó la diseñadora al diario Times of Israel, al que confesó que creció «con Sexo en Nueva York y el estilo que Carrie Bradshaw aportaba en cada episodio».