Otoño caótico y extremo en el hemisferio norte

SOCIEDAD

Una turista hace fotos este otoño junto al mirador de Soutochao, en el tramo del cañón del Sil que pertenece a Sober
Una turista hace fotos este otoño junto al mirador de Soutochao, en el tramo del cañón del Sil que pertenece a Sober CARLOS CORTÉS

Desde Canadá a Grecia, las temperaturas han alcanzado valores históricos durante los últimos días

05 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El 2021 ha sido un año convulso en todos los sentidos, también en el apartado meteorológico. No ha faltado de nada. Quizás el evento más extraordinario haya sido la ola de calor del pasado verano en Norteamérica que elevó el termómetro hasta los 49,6 grados en la provincia canadiense de Columbia Británica. Hace dos días esta misma región ha vuelto a ser noticia exactamente por lo mismo: haber alcanzado valores extremadamente altos para la época de año. Esta vez se ha batido el anterior récord de máxima registrado en un mes de diciembre. La cifra ha sido de 22,5 grados. En las últimas horas se han superado además marcas históricas en Bangladés (33,7 grados), Azerbaiyán (29,1) y Kazajistán (25,7).

En cuanto a Europa el episodio meteorológico más llamativo ha sido sin duda los 30 grados que se registraron en Grecia durante la madrugada del pasado 29 de noviembre. No solo ha sido un récord en las latitudes medias, sino también regiones tropicales. Una mínima de 30 grados en este período del año ni siquiera se puede considerar como algo atípico.

Y sin olvidar lo que ha ocurrido en Galicia durante el pasado noviembre, un mes muy seco y el segundo más frío de la serie histórica. La notable anomalía térmica negativa mensual ha sido precisamente porque la ausencia total de nubes favoreció que las noches fuesen muy gélidas, con registros negativos muchos días en el interior.

Esta meteorología tan impropia de finales de otoño es la nueva normalidad a la que habrá que acostumbrarse debido al nuevo comportamiento de la corriente en chorro. Hubo un tiempo en el que circulaba por estas fechas siguiendo los paralelos, de oeste a este. En esta situación Galicia es el país de la lluvia.

Ahora la corriente se destensa con demasiada frecuencia y las ondulaciones que ascienden y descienden generan episodios de temperaturas extremas, ya sean altas o bajas. Además, la parte ascendente que arrastra aire cálido puede aportar el alimento necesario para que un anticiclón como el de las Azores ejerza una intensa influencia cuando no debería. Esto es justo lo que ha pasado con las altas presiones durante los últimos dos meses. Eso sí, a partir de mañana la atmósfera recupera momentáneamente la normalidad y Galicia los temporales.